La marcha del 8M en Coahuila, gobernado por el PRI, fue reprimida por la policía.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Sábado 9 de marzo
En medio de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, manifestantes en Torreón y Gómez Palacio fueron reprimidas por las policías municipales y estatales durante la marcha del 8 de marzo.
Además, también se encontraban elementos del Ejército y de la Guardia Nacional para intimidar la movilización.
En Gómez Palacio, la alcalde priísta Leticia Herrera envió antimotines a golpear y dispersar a las mujeres que justamente salieron a las calles a exigir basta de violencia. Algunas personas resultaron heridas durante el enfrentamiento y hubo detenidas.
Por su parte, en Torreón también se registraron enfrentamientos con las fuerzas represivas. El alcalde Román Cepeda, también priísta, recibió al contingente en la Plaza Mayor con un despliegue desproporcionado de mujeres policías para amedrentar al contingente que venía llegando de Gómez Palacio y detener a varias de ellas.
En entrevista para La Izquierda Diario Coahuila, una manifestante declaró:
"Nos fuimos cuando se empezó a poner feo, si te puedo decir y dar testimonio, de que la policía en Gómez trató al contingente (más a los que íbamos casi al último) de la verga, y ni hablar en plaza mayor [Torreón] , no nos tocó lo de las rociadas de gas, porque nos fuimos, pero si vimos videos"
Por otra parte, las activistas denuncian también que la policía infiltró elementos vestidas de civil.
Aunque en las alcaldías de Gómez y Torreón pintaron algunos puntos emblemáticos de la ciudad de luces moradas -como si de verdad les fuéramos a creer que están del lado de las demandas del movimiento de mujeres-, ayer 8 de marzo se comprobó que los gobiernos son los principales perpetuadores de la violencia de género.
Esto a pesar de la cínica declaración del gobernador Miguel Riquelme, de que en el estado se "garantizan los derechos de las mujeres".
No obstante, la realidad es otra: como se registra en los videos que ya están circulando por las redes sociales, a las mujeres no se les respetó si quiera su derecho a manifestarse.
Es una desvergüenza que cuando las mujeres están marchando contra la violencia, las autoridades municipales y estatales las repriman. Desde el Movimiento de Trabajadores Socialistas y la organización de mujeres Pan y Rosas, nos solidarizamos con las manifestantes que valientemente tomaron ayer las calles por centenas, alzando la voz y entrando a escena en una región gobernada por autoridades que están en el top de las más corruptas, represivas y conservadoras del país.
Repudiamos el violento despliegue de policía municipal, estatal y antimotines que se suscitó en Torreón y Gómez Palacio contra la movilización del 8M. Cobardemente las fuerzas del orden reprimen a las mujeres mientras que se alianzan con los grupos narco-delincuenciales.
La represión al movimiento de mujeres este 8M fue generalizada en todo el país y se da en la antesala de las elecciones presidenciales, donde tanto la candidata de la oposición como la del gobierno son mujeres. No obstante, en Estados gobernados por los partidos que respaldan a ambas políticas, se presentó la misma violencia contra las movilizaciones.
¡Protestar es un derecho, reprimir es un delito!