A continuación reproducimos la carta de un trabajador metalúrgico y militante del PTS. Con más de veinte años de experiencia en el sector fue testigo de reiteradas entregas de conquistas disfrazadas con discursos "combativos" por parte de la UOM La Matanza.
Viernes 17 de abril de 2020 16:39
A los trabajadores metalúrgicos:
La pandemia de coronavirus que amenaza la vida de millones de personas en el mundo no puede ser excusa para que los empresarios metalúrgicos avancen en la reducción de salarios y la imposición de reformas laborales de hecho como la que plantean Acindar en La Matanza, acomodando a su antojo los horarios con horarios rotativos y sueldos de los trabajadores. Es una propuesta de acuerdo a la necesidad empresarial.
Los dirigentes de la UOM Matanza, encabezada por Hugo Melo, lejos de rechazar de plano esto y exigir el pago del 100% del salario de acuerdo al DNU decretado por el gobierno para todos los trabajadores en cuarentena, nos extorsionan a que los trabajadores tengan que decidir si aceptan el plan de la patronal con suspensiones y recortes del 30%, 40% o 50% del salario para evitar despidos. Y que las pymes en La Matanza no pueden pagar salarios por la cuarentena y necesitan apoyo del Estado.
Alberto Fernández acusó a Paolo Rocca de miserable cuando anunció 1450 despidos en una de sus empresas y sacó el DNU que prohíbe los despidos por 6 meses. Pero fue puro discurso. Es el mejor ejemplo de decir algo hoy y mañana hacer lo contrario ya que a los pocos días mandó al Ministerio de Trabajo a avalar los mismos despidos masivos. Por supuesto, tampoco desde el gobierno mueven un dedo por los miles de despidos de contratados, tercerizados, en negro y a los que no les pagan los salarios
Es sabido que la mayoría de los metalúrgicos cobramos sueldos por debajo de la línea de pobreza, producto de los acuerdos paritarios que tanto Caló como la UOM Nacional firmaron a la baja. Esto siempre fue aceptado sin chistar por el resto de los dirigentes, como Hugo Melo.
Claro que esto no sorprende de Antonio Caló, que nadie le puede sacar el título como máximo alcahuete y defensor de los intereses de los empresarios. Y jamás escucha ni le interesa lo que opinan los miles de metalúrgicos del país. Tenemos que organizarnos en asambleas en todas las fábricas y talleres y que el sindicato respete lo que decidamos. No pueden seguir entregando uno a uno nuestros derechos.
Caló es el promotor de un acuerdo nacional con los empresarios más ricos del país como Paolo Rocca de Techint, que tiene 6000 millones de dólares de fortuna personal y encima exige reducir salarios en todo el país al 50% mientras nosotros nos cagamos de hambre y no podemos ni siquiera llegar con la comida para nuestra familia. Además saben que ese acuerdo puede ser una referencia para todos los gremios. Flor de favor a los patrones que siempre privatizan las ganancias y socializan las pérdidas
.
En Matanza Hugo Melo dice que respeta lo que decidan los trabajadores. El quiere que los trabajadores decidamos cuánto van a bajarnos el sueldo mostrando que no nos queda otra que aceptar la suspensión con rebaja salarial y sino que nos despidan.
No podemos aceptar que esta sea la única salida. Sabemos que los empresarios se han enriquecido durante todos estos años, lo sabemos por todas las propiedades y vida de lujos que nos muestran mientras nosotros no tenemos nada. Que abran los libros contables de cada empresa para que veamos de una vez si es verdad que no tienen para pagar los sueldos. Queremos verificar las ganancias de todos los últimos años.
No se puede aceptar más el chantaje que si no aceptamos bajar los sueldos nos dejan sin trabajo. Ellos quieren que la crisis que generaron los empresarios la paguemos nosotros.Tenemos que organizarnos, es por defensa nuestra.
Llegó la hora de que pongan esas riquezas para pagar el 100% de nuestros bajísimos salarios y que toda empresa que cierre o despida se ponga a producir bajo el control de los mismos trabajadores que somos los que la hacemos funcionar. Están los ejemplos de los trabajadores ceramistas de Zanón, de los gráficos de Madygraf y de cientos de empresas que ante el abandono de los capitalistas se pusieron al hombro la gestión y control de la producción para mostrar un camino distinto. Los obreros organizados para luchar por sus intereses.
Incluso quieren que en medio de la pandemia volvamos a trabajar para seguir llenando sus bolsillos. Nuestra vida vale mucho y por eso tenemos que impulsar comisiones de seguridad e higiene en todas las fábricas, donde nosotros definamos si están las condiciones para trabajar. Alcohol en gel, barbijos, mascarillas, etc.
Acaban de firmar un acuerdo por 120 días con suspensiones compulsivas, rebajas salariales que solo quieren pagar el 70% del básico de convenio. En concreto significa alrededor del 50% descontando premios e ítems diferentes que conforman el sueldo. Es tan canalla ese arreglo que descontando los diferentes subsidios que les otorga el Estado, el gasto de los patrones es más o menos un 25 % del sueldo de marzo.
Los trabajadores no somos responsables de esta situación. Rechacemos este acuerdo que nos hunde en la miseria mientras los capitalistas dueños de las fábricas no ponen un peso de sus riquezas, exijamos un mínimo de $30000 de bolsillo para el operario, no se puede aceptar que vivamos con sueldos que no superen la línea de pobreza mientras los patrones no saben donde poner todo el dinero acumulado durante años producto de pagar sueldos miserables.
-* Asambleas en todos las fábricas y talleres para que decidamos cómo enfrentar el acuerdo. Basta de acuerdos a espalda de los trabajadores.
- Comisiones de seguridad e higiene dirigida por trabajadores
- Prohibición de despidos y suspensiones con rebaja salarial
- Apertura de los libros de contabilidad de las empresas que se enriquecen a costa nuestro y ahora quieren descargar su crisis sobre nuestras espaldas.
- Toma y puesta a resguardo de toda empresa que cierre o despida masivamente