Ante más de 35 mil personas Rosario Central derrotó como local a Atlético Nacional de Medellín en cuartos de final por la Copa Libertadores. Con un golazo de la figura Walter Montoya, Central consiguió un importante triunfo de cara al partido de vuelta. La serie se definirá la semana que viene en Colombia.
Viernes 13 de mayo de 2016
Decidido a no perder un centímetro, Central salió a acorralar el equipo colombiano y rápidamente obtuvo un premio por eso. A los 5´ Montoya cortó una salida del equipo visitante y clavó un tremendo zapatazo desde 35 metros que se coló en el ángulo derecho de Armani. Un verdadero golazo. Amanecía el partido y Central no podía arrancar mejor. Pero en la misma jugada Pinola fue reemplazado por una lesión en la tibia, de la cual aún no se sabe la gravedad. En su lugar ingresó el defensor Pablo Álvarez.
A los 9 minutos Bocanegra intentó de media distancia pero la pelota se fue muy lejos. A los 24 minutos Atlético Nacional, luego de quince pases seguidos, desbordó y tiró un centro que Jonathan Copete empujó, dejando atrás al arquero Sosa, que no terminó siendo gol gracias a un cierre salvador de Pablo Álvarez en la línea del arco.
La dinámica del partido era con el conjunto colombiano dominando mediante la posesión de pelota, y Central corriendo mucho para tapar los huecos que se generaban en un mediocampo que se volvía inmenso.
A los 39´ Sebastián Sosa desvió un fuerte tiro libre de Bocanegra tras una mano de Cervi, protestada por el técnico Coudet. A los 42 minutos llovió un tiro libre al área de Central y Álvarez cometió un claro penal que no fue cobrado por el referí.
Ya en el minuto 46 Montoya cortó un pase y generó una contra letal con un pase profundo a Herrera, que disparó y casi cuela la pelota por arriba de Armani luego de que rozara en un defensor. El rebote lo capturó el mismo Montoya que pateó desviado por arriba del arco. Excelente primera mitad del chqueño.
Esto era todo en el primer tiempo. Central se llevó quizás demasiado, explotando la máxima futbolera que dice que los partidos se ganan con goles, no con merecimientos. Los colombianos jugaban bien, como bien juega cada equipo colombiano, pero no podían concretar.
Pero el segundo tiempo sería otra historia, con Central presionando e intentando cuidar la pelota. En el minuto 47, un pase en profundidad de Cervi habilitó a Fernández, que con la pierna menos hábil disparó débilmente a las manos de Armani. El equipo rosarino entraba con otra mentalidad.
El minuto 61 fue para el infarto; tres atajadas excepcionales de Armani en la misma jugada ahogaron el grito de las 40 mil almas Rosarinas. Primero Montoya, luego Ruben, y nuevamente Montoya no pudieron abatir al arquero que se caía y levantaba una y otra vez para evitar el segundo gol canalla.
El trámite claramente había cambiado. Central estaba bien parado en la cancha, a diferencia del primer tiempo, y Atlético Nacional, quizá por lo mismo, ya no era el equipo arrollador que se había visto en la primera mitad.
A los 74´ Ruben bajó una pelota dividida y abrió de primera para Herrera que sacó un tiro que se estampó en el palo derecho generando el “uhh”, y las manos en la cabeza, de toda la hinchada. En el minuto 77 Cervi se escurrió por la punta derecha y quedó mano a mano con Armani. Pero sin ángulo, pateó afuera al segundo palo. Atlético Nacional respondió con un gran disparo de Bocanegra que hizo lucir el arquero canalla Sebastián Sosa.
Los últimos quince minutos se jugaron bien lejos del arco de Sosa. Central manejó la pelota y justificó su triunfo arrancando algunas amarillas para los colombianos. El canalla pisó fuerte en su casa y ya piensa ilusionado en la definición de la serie.