Imágenes de Christophe Dettinger, el boxeador francés considerado como el “defensor” de los “chalecos amarillos”, luchando contra la represión policial recorrieron el mundo. Te contamos la carrera deportiva del campeón.
Jueves 10 de enero de 2019 00:00
Apodado “Le Gitan de Massy” (El gitano de Massy) en el mundo del boxeo profesional, llegó a ser campeón nacional de Francia en el año 2007, en la categoría de peso Crucero. Pero a partir de sábado 5 de Enero del 2019 paso a ser conocido como “El boxeador caído del cielo”, “El héroe de los Chalecos Amarillos” y “El héroe de hoy”.
El episodio tuvo lugar durante la octava movilización convocada por los chalecos amarillos en toda Francia. Las fuerzas antidisturbios bloquean el paso a los manifestantes, lanzan gas lacrimógeno, golpean a trabajadores, mujeres, jóvenes y jubilados. Entre palazos y gases aparece un hombre alto, con gorro y saco negro. Se lo ve enojado, cansado de que la policía golpee a quienes marchan junto a él. Se ve como se pone en guardia y lanza una, otra y otra piña contra un policía con casco, escudo y bastón. El policía retrocede, es vencido, tambalea y finalmente retrocede.
El video en donde el boxeador ridiculiza a los gendarmes se viraliza: automáticamente salieron todos los medios, locales e internacionales, y hasta la propia Federación Francesa de Boxeo a condenar sus “actos de violencia” y a pedir por la salud de los Gendarmes machucados. De los trabajadores, estudiantes y jubilados heridos en las distintas jornadas solo hay un silencio cómplice oficial.
Pero lo cierto es que la simpatía y el cariño que despertó “El boxeador caído del cielo” no para de crecer. Podemos decir que se escribió una página más en la historia del boxeo y la lucha de los oprimidos. Podemos poner como primer caso histórico emblemático la pelea entre Jack Johnson (“el gigante de Galveston”) y James Jeffries (“la gran esperanza blanca”) en 1910 cuando la esclavitud había sido formalmente abolida pero la discriminación persistía en todos los planos: legal, social, político y económico. El segundo caso emblemático fue en 1974: el combate Mohammed Alí vs. George Foreman en Zaire. Alí volvía a luchar por su título luego de que la Federación Norteamericana de Boxeo se lo quitara por negarse a combatir en la guerra imperialista yanky de Vietnam.
La última pelea profesional de Christophe Dettinger fue el 6 de diciembre de 2013 contra Jean Marc Monrose, donde “el gitano” perdió por KO Técnico. Su récord profesional fue de 23 peleas, 18 ganadas por KO, 4 derrotas (3 por KO) y un empate. Pero a partir de la semana pasada hay que sumar que hizo retroceder a puño limpio a tres gendarmes con cascos y escudos. La vida y el boxeo dan revancha. Afirmamos que la semana pasada el boxeo y la lucha del pueblo trabajador volvieron a unir sus puños por una causa común: pelear por una vida digna.
No abandonar la lucha
“Debemos combatir con los puños”, le dijo Trotsky a su camarada Angélica Balabanoff en una carta el 3 de febrero de 1937 cuando esta le dijo que pensaba dejar de militar y volverse escéptica.
“¿Indignación, ira, repugnancia? Sí, y también cansancio momentáneo. Todo esto es humano, muy humano. Pero me niego a creer que usted ha caído en el pesimismo. Eso equivale a ofenderse, pasiva y lastimeramente, con la historia. ¿Cómo es posible? Hay que tomar a la historia tal como se presenta, y cuando ésta se permite ultrajes tan escandalosos y sucios, debemos combatirla con los puños.”, respondió Trotsky. Aunque tal vez no conozca a uno de los principales protagonistas de la Revolución de Octubre de 1917 y de la historia contemporánea, “el gitano” Dettinger recogió el guante.