En un momento político donde la derecha más conservadora (y pinochetista) se encuentra haciendo la constitución y legislado, llevando adelante su agenda anti derechos de las mujeres y disidencias, con ideas como la protección de la vida del que está por nacer, es decir, ilegalizar el aborto y promover los abortos clandestinos,
de la mano de esto, defendiendo que primero va el derecho preferente de los padres a educar a sus hijxs, negando la posibilidad de una educación pública que dé herramientas para reconocer el abuso y la violencia machista a estudiantes de diversas edades, es que se vuelve más necesario generar espacios en los lugares de estudio para discutir y elaborar entre estudiantes, profesores y trabajadores de la educación, un plan de educación sexual integral.
Sábado 16 de septiembre de 2023
¿Qué es la ESI?
La Educación Sexual Integral es una herramienta que se propone como proyecto profundizar el desarrollo y conocimiento personal de infancias y adolescencias. Así también, como mecanismo de aprendizaje para sobrellevar relaciones sexoafectivas desde el consentimiento, el respeto, la emocionalidad, la responsabilidad y la afectividad.
A su vez, otorgando la educación necesaria con el fin de prevenir embarazos adolescentes y enfermedades o infecciones de transmisión sexual - entendiendo que estas mismas son un problema social y de salud pública, esta debe ser impartida en todos los niveles y para cada miembro de la comunidad educativa.
Otra de las características más importantes de la ESI es la perspectiva de género que ésta toma, reconociendo que vivimos en una sociedad que sostiene instituciones y prácticas patriarcales ya sea en el ámbito político como en el económico, evidenciando la violencia machista, los roles de género impuestos, las divisiones sexistas en el trabajo y la educación, etc. Esto con el propósito de saber identificar la violencia machista y poder enfrentarla previniendo así las situaciones de acoso y/o abuso sexual.
¿Por qué necesitamos una Educación Sexual Integral?
Actualmente en Chile no existe un plan real de Educación Sexual Integral, es una demanda del gobierno de Gabriel Boric que está en deuda, ya que la aprobación y la implementación de esta no ha sido constituida en todos los establecimientos educativos.
El Mineduc sólo ha puesto a discusión opcional el impartimiento de una minuta de reflexión sobre ESI en colegios municipales, dejando a criterio de la dirección de cada institución educativa presentarla. Además de no actualizar sus orientaciones técnicas de sexualidad, género y afectividad desde el año 2017.
En el marco capitalista y patriarcal actual en que nos encontramos, nos aboca la necesidad de luchar por una Educación Sexual Integral más que nunca, para educar más allá de los prejuicios y las ideas conservadoras que prevalecen hoy en día en la enseñanza, como lo es la cis- heteronorma y la patologización de las identidades trans, además de la invisibilización de estas mismas.
En un momento político donde la derecha más conservadora (y pinochetista) se encuentra haciendo la constitución y legislado, llevando adelante su agenda Anti derechos de las mujeres y disidencias, con ideas como la protección de la vida del que está por nacer, es decir, ilegalizar el aborto y promover los abortos clandestinos.
De la mano de esto, defendiendo que primero va el derecho preferente de los padres a educar a sus hijxs, negando la posibilidad de una educación pública que dé herramientas para reconocer el abuso y la violencia machista a estudiantes de diversas edades, es que se vuelve más necesario generar espacios en los lugares de estudio para discutir y elaborar entre estudiantes, profesores y trabajadores de la educación, un plan de Educación Sexual Integral.
