La Izquierda Diario (LID) entrevista a Pablo Villegas, investigador del Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB), quien nos habla de la represa de El Bala.
Jueves 6 de octubre de 2016
Foto: alltravels.com
LID: ¿Cuál será el impacto medioambiental de la represa?
PV: Según declaraciones del gobierno, “después de estudios hechos”, la represa solo afectará el 0.77% del parque Madidi. Esto es como si un estudiante de medicina dijera que el impacto de una inyección se da solo en el lugar del pinchazo.
Por eso la evaluación de los impactos de una represa debe abarcar toda la cuenca hidrográfica; jamás sólo el área de inundación. Esto es tan importante que en Brasil el EIA (Estudio de Impacto Ambiental) de las represas del rio Madera (Jirau y Santo Antonio), que aunque abarcó un área mayor a la inundada pero no a la cuenca fueron paralizadas por varios meses por la autoridad competente.
La experiencia muestra que es muy difícil de predecir la inundación. En el caso de las represas del Madera, la inundación resultó más grande de lo previsto cuando llegaron las lluvias del 2014, al punto de que se inundaron inclusive las áreas que habían construido las mismas empresas.
Es difícil que se haga una evaluación y predicción correcta de los impactos porque hay en juego intereses económicos muy grandes. Con mucho dinero en juego, lo que les importa a las empresas constructoras es que la obra se haga aunque no sirva. Para colmo, la evaluación de impactos la realiza la parte interesada y esto choca con su interés de no mostrar la gravedad de los impactos ni la magnitud real de los costos de la obra; esto es peor cuando la parte interesada es el gobierno y es el mismo gobierno el que aprueba la evaluación. Esto puede llevar también a limitar el derecho a la información y la libertad de opinión de la sociedad.
LID: ¿Cuál será el impacto social?
PV: Tradicionalmente se ha sostenido que el impacto de una represa se produce aguas arriba. De ser así se afectaría a las comunidades indígenas y de colonizadores. Pero ahora, y especialmente desde las represas de Jirau y Santo Antonio, es claro que el impacto también se da aguas abajo. Y abajo están Rurrenabaque (con 20.000 habitantes), San Buenaventura (con 10.mil) y otras poblaciones. O sea que la población en riesgo es mucho mayor que por ejemplo 4000 personas o 53 comunidades.
También hay que tomar en cuenta las características propias de la obra. Para una represa de gran magnitud como sería El Bala, el campamento será también de gran magnitud, para movimiento de materiales, transporte, miles de obreros, etc., más las vías por donde se haga el transporte correspondiente; donde se instale esto se destrozará todo. Eso pone en riesgo a Rurrenabaque y San Buenaventura.
Por otra parte, desde el punto de vista del impacto económico, la represa nos afecta a todos porque todos tendremos que pagar lo que cueste.
LID: ¿Cuánto será el costo de la represa?
PV: Se ha dicho que costará aproximadamente 7000 millones de dólares y que generará 1250 millones anuales por la exportación de 3600 MW de electricidad.
La experiencia muestra que las represas de esta magnitud terminan costando mucho más de lo previsto. Incluso hay un estudio del propio Banco Mundial del 2010. Pero basta ver el caso de Jirau y Santo Antonio que en un comienzo iban a costar 5,5 mil millones y después el costo final se calculó en 27 mil millones incluyendo la línea de transmisión que es el cableado por donde se lleva la corriente. Lo mismo ocurrió con Itaipú por ejemplo y Paraguay hasta ahora sigue pagando la deuda.
En cuanto a los ingresos de 1250MM. Son cifras alegres. ¿Nos están hablando de lo que queda después de pagar la deuda, los intereses, después del tiempo que tarde la represa en llenarse (que también tiene un costo), en fin, después de descontar los costos de producción? Nada de eso porque todavía no tienen los estudios.
LID: ¿A dónde se exportará la energía. Hay un comprador para nuestra energía?
PV: Ese es el gran problema económico de la represa de El Bala. Habría dos posibles mercados por su cercanía; Perú y Brasil.
Perú no es mercado porque ellos tienen en proyecto 5 represas en las cabeceras del río Madre de Dios, entre ellas, la de Inambari, en cooperación con Brasil, para exportación a ese país.
Y en cuanto a Brasil, la zona fronteriza con Bolivia, Rondonia principalmente, es excedentaria, porque ya existen las represas de Jirau y Santo Antonio que ya tienen el problema de sus costos a los cuales se suman el transporte de la energía hasta los mercados. Para tener una idea, la línea de transmisión de Jirau y Santo Antonio llegaba a costar, según Switkes, el 35% del total de las dos represas, o sea 9 de 27 (en miles de millones de dólares).
A esto hay que añadir que Brasil está en la peor recesión económica de los últimos cien años y cuando un país se achica económicamente en vez de crecer, se achica también el consumo de energía.
LID: ¿Se sabe a qué precio se venderá la energía del Bala?
PV: Eso no lo define el costo de producción sino el precio de la energía en el mercado donde se la quiere vender. Y a ese mercado no le va a importar si a Bolivia le sale caro producir esa energía ni lo que le cuesta transportarla 500 km (por lo menos) hasta la frontera. Ahora, como ese mercado está abarrotado, no hay otra que vender más barato, y como no es un mercado libre porque los productores locales están protegidos se tendrá que vender mucho más barato. Los compradores naturalmente sabrán que estamos desesperados por vender. Así tuviéramos el mismo costo de Jirau y Santo Antonio, se sumará el costo de transporte y además el derecho de piso.
Además hay otro factor. El proyecto de represas del Perú para exportación al Brasil tiene en trámite un acuerdo de mercado con ese país que está en el parlamento peruano para convertirse en ley, si lo aprueban claro está. ¿Bolivia tiene algún trámite semejante?
Entonces la cuestión económica de la represa es simple: ¿podrá El Bala producir electricidad a un costo tan bajo que derrumbe cualquier barrera de los mercados potenciales? La respuesta es también simple.
¿Es para esto que van a destruir la riqueza de dos áreas protegidas y la economía local y nos van a comprometer a todos en el pago de una gigantesca deuda?