Una patota afín al presidente de Boca agredió e hirió de gravedad a miembros de una agrupación opositora. Quienes gobiernan la institución se lavaron las manos. igual que el Gobierno de la Ciudad. Advertencia, esta nota contiene escenas de macrismo explícito.
Lionel Pasteloff @LionelPasteloff
Sábado 7 de mayo de 2016
El miércoles 4 se estaba desarrollando el Consejo Consultivo de la Comuna 4 (perteneciente a Pompeya y Barracas). En él, se encontraban miembros de la agrupación "Boca es Pueblo", de reconocida militancia contra la nefasta gestión macrista en el club. Los miembros de ese espacio se presentaron reclamando que se legitime un consejo anteriormente convocado, en el que se rechazó la venta de los terrenos de Casa Amarilla. Lo hicieron, tal vez, subestimando los intereses que había en juego y la fiereza con la que pensaban defenderlos en el entorno del mandatario xeneize.
Cuando surgió este tema, apareció una patota que comenzó a hostigar a los disidentes. Pero la aparición no fue sólo para amedrentar: Matías Scinica fue herido con un arma blanca en el cuello y Fernando Abal Medina (hermano del senador y militante de Descamisados en el barrio) recibió un culatazo que lo dejó inconsciente.
La Policía se hizo presente mucho más tarde, evidenciando una total impunidad de los agresores para proceder. Vale recordar que esto ocurrió en un edificio público. Según informó Mariano Parada López en El Destape Web, uno de los agresores fue Rodolfo Corzo. "El cordobés", con historia en el PJ porteño y en SUTERH, actualmente tiene un cargo en esa Comuna 4. Pese a su pasado pejotista, desde 2009 responde al macrismo. Quien porta un arma blanca en las imágenes es nada menos que su hijo.
Boca fue el único que ofertó en la licitación por la venta de 3,2 hectáreas en los terrenos cercanos a Casa Amarilla. Supuestamente ahí se iban a construir viviendas sociales, pero se sabe que la directiva apunta a hacer un nuevo estadio para 80 mil personas y jubilar La Bombonera, haciendo negocios con empresarios extranjeros. "Boca es Pueblo" tiene como una de sus banderas trabajar con los vecinos respecto a los problemas edilicios, de vivienda y todo lo inherente a la identidad de los habitantes del barrio. Esto también se conecta con el club, a partir de los desmesurados manejos de la gente de "El Tano" por realizar obras faraónicas y causar inconvenientes a los vecinos. No son pocos los que los responsabilizan de algunos incendios intencionales en la zona. Lo curioso es la excusa que utilizan los propulsores de la nueva cancha. Se valen de una recomendación de FIFA (que no es obligación) respecto a tener una determinada cantidad de espectadores sentados, señalando que eso le hará perder capacidad a La Bombonera. Lo que omiten es que fueron ellos mismos (Moscariello, vicepresidente de Boca y legislador del PRO) quienes votaron una ley para que los estadios tengan menos gente de pie. Si, lo que obligaría a la Comisión Directiva a "hacer otro estadio" es algo que ellos mismos votaron. Curioso, ¿no?
Tras el ataque, los medios se apresuaron a consignar el asunto como "una pelea entre militantes del Frente para la Victoria y el PRO" o "pelea entre facciones de la barra". Horacio Rodríguez Larreta, desaparecido durante los días conmocionantes de Time Warp, rápidamente accedió a Radio Mitre para hacerse el desentendido y negar que su partido tuviera "patotas". Claro que no las tiene, son independientes, responden al mejor postor. Mientras tanto, el club emitió un comunicado que dio verguenza ajena, donde se desentendió de todo y fingió una ingenuidad que no sería creíble ni en un chico de cuatro años. La perlita fue que esa declaración trascendiera primero a través de "Tato" Aguilera, un alcahuete de la dirigencia que la recibió antes vía whatsapp.
Boca pasó a cuartos de final de la Libertadores. Con ese éxito y la inestimable colaboración del periodismo servil, el tema puede desaparecer en breve. En cuanto los socios e hinchas bosteros alcen la voz nuevamente, volverá a haber "enfrentamientos" y "discusiones" de los que nadie se hará responsable. De la mano de Angelici y Macri, todos impunes vamos a quedar.