LA VIDA DE LOS TRABAJADORES IMPORTA. Después de las denuncias públicas por 21 casos de Covid-19, cierran el Coto de Lanús

Los empresarios se envalentonan y el municipio los avala

Uno creería que después del escándalo que se desató estos días con los testimonios de sus empleados y los reclamos de los vecinos, el procedimiento más lógico sería la clausura inmediata del edificio en cuestión. Pero no,recién hoy lo cerraron. Lo cerraron con otro escándalo a cargo de Eduardo Búfalo que se negó al cierre y se atrinchero frente al portón para que no entren los inspectores municipales.

En las última semanas ha crecido exponencialmente el número de contagios en el conurbano sur, alcanzando en Lanús más de 1100 casos, lo cual vuelve de inmediata urgencia y necesidad actuar de forma concreta ante cualquier foco de infección que se presente. El cierre tiene que ser permanente.

Luego de escuchar el escándalo de Búfalo encargado de la sucursal y mano derecha de Alfredo Coto el municipio a cargo de Néstor Grindetti decidió mantener las puertas del establecimiento abiertas, clausurando el sector en cuestión y funcionando con normalidad, como si todo esto nunca hubiera pasado. Hasta hoy los trabajadores tenían que seguir cumpliendo sus tareas exponiéndose al inminente contagio y llevando también el riesgo a todos los vecinos que viven alrededor del establecimiento.

Mirá los testimonios de los vecinos de Villa Caraza.

Alfredo Coto no solo expuso la vida de sus trabajadores sino la de los vecinos del barrio, por la zona de villa caraza hay barrios populares como el Eva Perón. Por ejemplo las familias del barrio que utilizan la Tarjeta Alimentar solo pueden comprar en el Coto y ya sabemos cómo impacta el Covid-19 en los barrios más humildes donde hay hacinamiento y no hay agua potable.

Coto ya te conocemos, querés que la crisis la paguen los trabajadores y sus familias

Lamentablemente, episodios como estos están empezando a multiplicarse. Desde el comienzo de la cuarentena obligatoria hemos podido observar muchos episodios similares que siempre tienen dos denominadores comunes: por un lado el desinterés total de los empresarios por la vida humana; por otro, a los trabajadores teniendo que pagar, con sus salud y la de sus familias, por esta clase de atropellos.

Sin ir más lejos, Coto ya presenta por los menos dos episodios similares en sus sucursales de Once y Recoleta para poder seguir funcionando con normalidad. Mientras tanto, confirmamos que Alfredo Coto no está pasando ninguna crisis económica, es uno de los mas ricos del país y tiene la impunidad otorgada por todos los gobiernos para hacer lo que quiere llegando al descabellado nivel de adquirir un arsenal de armas excusándose que “se prepara para posibles saqueos”.

Todo esto se ve acompañado por un gobierno que día a día pierde más la imagen de fuerza, decisión y preocupación que tanto intentó construir al comienzo de la pandemia. Como denunciamos desde un principio desde La Izquierda Diario, nos encontramos ante una “cuarentena sin GPS” ya que no hay medidas acordes a los problemas económicos y sociales. Tanto el presidente Alberto Fernández y el gobernador provincial Axel Kicillof sostienen la impunidad de los empresarios como sucede con la ley anti despidos que no se cumple ya que hay 4,8 millones de trabajadores afectados por despidos, suspensiones y rebajas salariales.

Las vidas obreras importan: es momento de organizarse por ellas

“Si yo cumplí ¿Por qué ellos no cumplen?” son las palabras de uno de los trabajadores contagiados en Coto Lanus. Y la respuesta está más que clara, porque no les importa. Sabemos que lo empresarios no van a parar de poner en riesgo nuestras vidas con tal de cuidar sus ganancias por eso crecen los contagios en las empresas pero comienza a haber respuesta de los trabajadores. Crece la necesidad de organizarse y unirse.

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Entonces no nos dejan opción, es necesario que todes les trabajadores esenciales y no esenciales, con trabajos en blanco o en negro, las familias trabajadoras, estudiantes y desocupados, a los que nos toca estar del lado de los “perdedores” nos unamos y juntemos para poder organizar una fuerza que realmente haga frente a estos atropellos.

Tienen que dejar de facturar a costa de nuestras vidas mientras a la vez nos amenazan con suspensiones y despidos. Estamos frente a un momento de urgencia que requiere decisiones a la altura, decisiones que sabemos que no podemos esperar de las patronales, los sindicatos o el gobierno, decisiones que tienen que nacer desde los espacios de trabajo, donde nos encontramos quienes realmente ponemos en movimiento al país y a la economía todos los días.

Por eso invitamos a todo aquel que crea que no tenemos que quedarnos de brazos cruzados frente a esta realidad que se recrudece a participar de un Encuentro con trabajadores de distintos sectores de forma anónima este sábado 27 de junio y con toda la seguridad contra los buchones y sindicalistas vendidos.

Contactate con nosotros al 11 2386-6820