×
×
Red Internacional
lid bot

San Salvador de Jujuy. Discurso del Intendente de la capital jujeña: una vuelta a las viejas promesas

El discurso del Intendente capitalino, estuvo signado por las excusas frente a los grandes problemas del pueblo trabajador de San Salvador de Jujuy y el cinismo frente a la represión en el barrio Campo Verde y la persecución a los vendedores ambulantes.

Martes 6 de abril de 2021 21:20

En la noche de ayer, en el Centro Cultural “Éxodo Jujeño”, tuvo lugar el discurso de inauguración del periodo de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante de San Salvador de Jujuy por parte del Intendente de la ciudad, Raúl “Chuli” Jorge.

El mismo que duró más de dos horas: el Intendente hizo un repaso de las acciones del municipio durante el 2020 y lo que va del 2021: pandemia, gestión de obras públicas y otras políticas desarrolladas por la Municipalidad, un discurso con poco que ofrecer frente en el marco de una situación en que las necesidades y los grandes problemas del pueblo trabajador de la ciudad no han hecho más que agravarse.

La pandemia del covid-19 en la ciudad

Ante a la pandemia del coronavirus, Jorge planteó que el municipio estuvo a la altura. Nada más alejado de la realidad: fueron los trabajadores que sostuvieron los servicios en las etapas más duras de la pandemia, pese a que numerosos trabajadores enfermaron y lamentablemente muchos murieron a causa de la enfermedad, datos que el Intendente no especificó.

Los recolectores de residuos y las barrenderas tuvieron que tomar medidas de fuerzas para que se realicen tests de covid-19, exigiendo provisión de elementos de protección personal y que se tomen más medidas de prevención. Hoy siguen reclamando por mejores condiciones laborales, contra la precarización laboral y que se aceleré el proceso de vacunación de los trabajadores esenciales de la Municipalidad.

Obras públicas: excusas y promesas electorales

Con respecto a las obras públicas, el Intendente se excusó repetidas veces, explicando porque se priorizó la obra del parque lineal Xibi Xibi, el parque Belgrano o el ascensor urbano en la zona de la vieja terminal por sobre otras obras que pudieron hacerse. Reconoció que no se avanzó en obras frente a la precaria infraestructura de la ciudad, que se expresa en las más de nueve mil familias que aún viven en asentamientos y que sufren la falta de acceso a servicios esenciales, obras de alcantarillado y asfalto.

Pese a insistir que no se cuentan con fondos necesarios y existe una gran dependencia de nación, Jorge anunció que se urbanizaría la zona del asentamiento de Aeroclub, un lugar donde viven cientos de familias en una situación muy precaria, sin servicios, entre el barro y las aguas servidas. Este anuncio se dio sin mayores precisiones presupuestarias o fecha de inicio de obras, esperamos que no sea un anuncio electoral de cara a junio, como el gobernador Gerardo Morales, que inaugura carteles de obras que jamás se terminan.

La crisis del transporte urbano

Con respecto a la situación del transporte urbano Jorge insistió que la crisis es por la diferencia que hay entre los subsidios que recibe el transporte en Capital Federal, con respecto al interior, pero omitió mencionar porque los empresarios del transporte a pesar de recibir mensualmente subsidios millonarios son incapaces de garantizar el salario de los trabajadores.

Por el contrario, actúan libremente sin dar cuenta de lo que reciben, mientras tanto los ex trabajadores de Unión Bus, que en su momento fueron brutalmente reprimidos cuando reclamaban por sus salario, siguen a la espera de si podrán cobrar la enorme deuda salarial que mantiene Rodolfo Severich con ellos.

Precarización y desocupación, persecución a los ambulantes

Frente al enorme problema de la falta de trabajo y la precarización, el Intendente habló de “autoempleo” y “emprendurismo”, es decir que no hay políticas de parte de la Municipalidad para generar puestos de trabajo, mientras la precarización laboral campa a sus anchas en el comercio, donde sus trabajadores siguen reclamando por la adopción del horario corrido de atención.

Incluso aceptando el gran problema del trabajo en la ciudad, el Intendente aseguró que para los vendedores ambulantes y feriantes solo se dieron 800 permisos, una cifra irrisoria cuando son miles los que dependen de esta actividad y a medida que avanza la crisis social, son cada día son más.

Los vendedores, afirmó Jorge, deben ser controlados. Este control se expresa en la persecución y el hostigamiento constante de parte de la Municipalidad contra los vendedores ambulantes, este acoso, tuvo entre sus casos más violentos, el de la vendedora Justina Mamani, que fue arrastrada por una camioneta de la Municipalidad por una cuadra y media, luego que se le haya decomisado su mercadería.

Barrio Campo Verde

Por último, Jorge se refirió a las políticas municipales con respecto a la recreación, el deporte y la creación de espacios verdes, un discurso cínico y vacío, cuando el Intendente y el oficialismo del concejo fueron parte de la política represiva contra los vecinos de Campo Verde, reprimidos el 8 y el 17 de marzo. Una hipocresía, cuando los concejales de la izquierda junto a decenas de vecinos fuimos apaleados por la policía de Gerardo Morales.

El bipartidismo, garante de la política del gobierno de “Chuli” Jorge

La política de persecución a los ambulantes, ajuste a la obra pública, la situación crítica del transporte urbano entre otras cosas no podría pasar sin la valiosa ayuda que prestó el peronismo en el Concejo Deliberante.

Pese a contar con los números para imponer una mayoría opositora, los concejales del PJ, prefirieron acordar con el radicalismo y fueron fundamentales para votar tarifazos, presupuestos de ajuste y normativas que legalizan las arbitrariedades del municipio contra los sectores populares, tal como la Ordenanza N° 7474/2020, una normativa discriminativa, que da una base para la política de persecución contra vendedores ambulantes de la Municipalidad.

El Intendente remarcó este importe aporte, agradeciendo con nombre y apellido a los concejales peronistas por los servicios prestados a su gobierno, tal como si fueran los empleados del mes del radicalismo.

Fortalecer los sectores que salen a la lucha y pelear por su independencia política

Una oposición “responsable”, más bien servil, es lo que quiere el gobierno y es lo que el peronismo le garantiza.

Un régimen, que quiere preservar siempre sus privilegios y garantizar los negocios de unos pocos a costa de las mayorías, tiene en la izquierda un problema. Es la única fuerza opositora: esta en cada conflicto, con las vendedoras ambulantes, con los trabajadores municipales, con los docentes o los choferes del transporte público y cada sector que sale a pelear.

Por esto buscan proscribirla, como lo hacen negándole asumir su banca a Gastón Remy en la Legislatura de Jujuy hace once meses. En este sentido hay que defender al pueblo trabajador que sale a la lucha, ayudar a unificarlo, que se coordine y en este sentido defender a las bancas del Frente de Izquierda que se juegan por esta perspectiva.