El apoyo a los dos millones de campesinos en el país y la dependencia alimentaria fueron los temas centrales de la conferencia matutina de Andrés Manuel López Obrador.
Jueves 11 de julio de 2019
La conferencia matutina del día de hoy fue dedicada al sector agropecuario anunciando cuatro programas de apoyo al sector que tienen como objetivo, según Andrés Manuel López Obrador, de terminar con la dependencia alimentaria y apoyar a uno de los sectores más pobres del país: los campesinos del sur y sureste.
Según el Consejo Nacional de Evaluación Política de Desarrollo Social (CONEVAL) el 43.6 % de los mexicanos está en condición de pobreza, de los cuales 7.6 % que se encuentra en pobreza extrema son campesinos.
A su vez la dependencia alimentaria que se profundizó tras la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) nos tiene en una dependencia alimentaria brutal en la que el 80 % de los productos que se consumen en el país son importados.
Frente a esto la ruta del gobierno federal se basa en tres pilares: incrementar la productividad, impulsar la agricultura sustentable y la agricultura más incluyente reconociendo las diversas necesidades de los campesinos.
Los programas que se anunciaron fueron cuatro: Producción para el bienestar, Precios de garantías y canasta básica, crédito ganadero a la palabra y fomento a la productividad pesquera y agrícola.
Éstos tienen como objetivo coadyuvar a la autosuficiencia alimentaria con apoyos directos y sin intermediarios a pequeños productores para combatir la corrupción y el clientelismo en estos programas, según el presidente.
Primero los pobres
El objetivo de apoyo a los dos millones de campesinos en el país y todo el discurso contra los gobiernos neoliberales que nos pusieron en esta situación parecen tener un tinte progresivo. Sin embargo, los programas siguen teniendo enormes limitantes, ya no para pensar en abatir la dependencia alimentaria, sino para sacar a los campesinos de la pobreza.
Y es que los apoyos para los campesinos son mínimos, apenas mil pesos por hectárea. Además de que no se habla de ayudar con ciencia y tecnología el desarrollo del campo, mucho menos se tocó la condición laboral de los 6 millones de jornaleros que, como lo demostró la revuelta en San Quintín, trabajan bajo condiciones laborales inhumanas.
Además, en el terreno de la dependencia alimenticia, una de las principales propuestas es la siembra de café. Pero parece que al gobierno federal se le olvidó que en diciembre AMLO se reunió con los directivos de Nestlé para anunciar una inversión 154 millones de dólares para producir 20mil toneladas de café ¿cómo puede competir el pequeño productor contra esto?
Una salida para que el campesinado pobre emerja de esta situación tiene que venir de la mano de la unidad con los trabajadores de la ciudad ya que de esta manera se pueden garantizar créditos baratos para los campesinos que implicarían no sólo un aporte monetario sino también la tecnología necesaria para el desarrollo del campo.
