×
×
Red Internacional
lid bot

Crisis de la vivienda. El sueño de la casa propia es un pesadilla: En 10 años suben valores en un 75%

La empresa de tasación y consultoría Tinsa Chile certificó que el precio promedio de las viviendas en Chile subió 75% sólo entre 2011 y 2021, esto mientras el Banco Central evidenció en su último informe financiero, que las condiciones para acceder a un crédito hipotecario se han vuelto más restrictivos, retrocediendo en 20 años. De esto último responsabilizan a la crisis sanitaria y a los retiros del 10%.

Viernes 5 de noviembre de 2021

A fines de octubre un informe emitido por Tinsa Chile, empresa dedicada a la tasación y consultoría inmobiliaria, evidenciaba cómo había aumentado el valor de las viviendas en nuestro país. En promedio en el territorio nacional el aumento sería de un 75% en los últimos 10 años, lo que significa que hoy las viviendas estarían en una valorización de alrededor de 3.980 UF. Según Felipe García, director de Tinsa Chile, dos tercios del incremento del valor de la vivienda se generaron entre los años 2011 y 2016. La causa tiene que ver con el boom de demanda luego del terremoto de 2010, a lo que se suma la buena situación económica del país, el precio del suelo en proyectos de alta densidad e incrementos en los costos por escasez de mano de obra.

A esto se le suma otro dato, el Banco Central en su informe de Estabilidad Financiera evidenció que las condiciones para acceder a créditos hipotecarios se han vuelto más restrictivos, es decir, con mayores condiciones para acceder a ellos. Esto se asemeja a las condiciones que se tenían hace 20 años para acceder a créditos, donde los tiempos de pago son menores lo que implica cuotas de pago más altas y además con menos cobertura, donde los créditos hipotecarios, debido al alto costo de las viviendas no cubren más de un 80% del valor real de las viviendas, obligando a las familias a endeudarse con otros créditos complementarios.

¿Por qué los bancos han decidido aumentar las condiciones? en voz de Mario Marcel, presidente del Banco Central, indica que “las condiciones financieras locales se han deteriorado producto de liquidaciones forzosas de activos que han afectado en particular el mercado de capitales domésticos y por esa vía han incidido en las tasas de largo plazo y del tipo de cambio”, en palabras simples, culpa a los retiros y al a condición de crisis pandémica, según su análisis la liquidez que ha producido los retiros de las AFP a inestabilizado el mercado local, al parecer el sistema económico que nos rige no funciona si no nos endeudamos.

Sin embargo, nada dicen fenómeno local que ha devaluado el valor del peso, y que se articula con hechos como que por ejemplo, las empresas en manos de las 10 grandes familias dueñas del país han retirado este año prácticamente el 100% de las utilidades, y son más de 20 mil millones de dólares si tomamos las 500 grandes empresas. Todo este dinero, que no va a la inversión, se fuga al extranjero, a las cuentas en dólares que manejan y en sus sociedades off shore en decenas de paraísos fiscales, devaluando las monedas locales frente al dólar. Esta inestabilidad económica no es regulada por ningún ente y afecta la vida cotidiana de todos quienes vivimos en Chile.

Frente al problema de la vivienda las soluciones que se articulan parten por tomar medidas de fondo ante este déficit, implica la expropiación de todos los especuladores del suelo y la vivienda: los trabajadores y las comunidades tendrían que hacer un inventarios de todos los suelos, casas y departamentos disponibles en las zonas “urbanizadas” en manos de bancos, AFP, grupos capitalistas de todo tipo, y nacionalizarlos bajo control de trabajadores y comunidades, para desarrollar planes de construcción de vivienda y planes urbanos y de obras públicas financiados por el Estado acordes a las necesidades de las y los trabajadores y el pueblo.

Solo medidas que afecten las ganancias de los grandes empresarios inmobiliarios podrán resolver concretamente los grandes problemas de las familias trabajadoras y el pueblo.