La Fiscalía Nacional Económica (FNE) acusó a cuatro productoras de alimentos para salmón de colusión en un requerimiento que presentó ante el Tribunal de Defensa de Libre Competencia (TDLC). Estas productoras son grandes empresas de salmones que tienen sus matrices en el extranjero. Mientras los empresarios se coluden para aumentar sus ganancias, depredan el medio ambiente y dejan en evidencia que las políticas del gobierno “anti-abusos” no tienen efecto para ellos.
Viernes 20 de diciembre de 2019
Las empresas coludidas son Biomar Chile S.A. (Biomar de Dinamarca), Comercializadora Nutreco Chile Limitada (Skretting de Holanda), Ewos Chile Alimentos Limitada (Ewos de EEUU) y Vitapro Chile S.A. (Salmofood de Perú), y se las acusa de "mantener un acuerdo para fijar los precios de venta de los alimentos para salmones, conocidos también como dietas, entre los años 2003 y 2015" . El “castigo” solo vendría a ser pagar una multa que asciende a US$70 millones en total.
La FNE solicitó esta multa considerando "la gravedad y extensión temporal del acuerdo y a que las empresas requeridas son las únicas que comercializan alimentos para salmones en Chile".
Estas empresas que tienen matrices en el extranjero, abusan de su posición monopólica en la industria del salmón en Chile, ya que son las únicas que lo venden en gran escala, aprovechándose así de mover los precios a su gusto para que no afecten sus ya abultados bolsillos, mientras dejan sin trabajo a los pescadores artesanales producto de la contaminación y hacen cada vez más inaccesible para la población este tipo pescado.
La polémica industria del salmón
Grandes escándalos medioambientales han protagonizado las empresas salmoneras sobre todo en el sur de nuestro país, el 2007 vimos un brote de un virus llamado ISA, que dejó sin trabajo a más de 15 mil personas, producto de la mayor crisis sanitaria que vimos en esos años en la industria nacional.
Y cómo olvidar el 2016 el conflicto y fuerte movilización que hubo en Chiloé, donde solidarizamos también movilizándonos en todo Chile, ya que las empresas salmoneras vertieron alrededor de 9 mil toneladas de salmones muertos al mar, lo que intensificó la marea roja dejando a los pescadores artesanales sin trabajo, una mortandad de peces sin precedentes y una profunda crisis medioambiental, social y económica.
Estos son los empresarios que protege el gobierno de Piñera, y que se llevan las ganancias limpias a sus bolsillos mientras lo que realmente ensucian es nuestro medio ambiente, dejando familias completas sin trabajo, abriendo catástrofes que solo la pagamos los trabajadores y pobladores de los lugares donde ellos deciden instalarse.
Nancy Lanzarini
Profesora de Lenguaje y Comunicación.