Ayer mantuvieron una reunión informal los sectores de la cúpula sindical con más urgencia por mantener la tregua con el Gobierno. Se habla de no realizar el Confederal del 25 de septiembre.
Diego Iung @IungDiego
Viernes 1ro de septiembre de 2017 10:11
La reunión fue en la sede de la UOCRA y allí se encontraron dirigentes afines a los sectores de los "gordos" e "independientes": además de Gerardo Martínez estuvieron Andrés Rodríguez (UPCN), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Sergio Romero (UDA), Hector Daer y Carlos West Ocampo (Sanidad), Rodolfo Daer (Alimentación) y Francisco Barba Guiterrez (UOM).
Según trascendió por diversos medios de comunicación, las definiciones generales del encuentro estuvieron vinculadas a retomar la próxima semana el diálogo con el Gobierno nacional. Al mismo tiempo se buscó unificar posiciones para frenar cualquier posibilidad, ya de por sí lejana, de que se concrete una fecha de paro nacional en el próximo Comité Central Confederal de la CGT.
Según la información brindada por periodistas cercanos al mundo gremial, en la reunión también se indicó que el MASA y los gremios vinculados al transporte acompañan la negativa a tomar cualquier medida de fuerza.
De esta manera buscan cerrar filas luego de los anuncios de Juan Carlos Schmidt en el acto de cierre de la última movilización cegetista del pasado 22 de agosto. Ese día, de manera bastante ambigua, el actual triunviro de la CGT había deslizado la posibilidad de que el próximo Confederal discutiera la fecha de un paro nacional, tal como vienen sugiriendo el moyanismo y la Corriente Federal de Sergio Palazzo.
Sin embargo, de la reunión también trascendió la versión de que incluso esa reunión podría no llevarse a cabo. Es decir, la fecha en la que se decidiría alguna medida de fuerza no existiría.
Este nuevo intento de “unir fuerzas para mantener la tregua” viene luego de que, en respuesta a la movilización, el Gobierno decidiera desplazar de sus cargos a Ezequiel Sabor y Luis Scervino (Subsecretario de Trabajo y Superintendente de servicios de Salud respectivamente). El mismo tono de ataque se vio en la amenaza de pedir que se den a conocer los bienes de la dirigente sindical.
Esta unidad entre los sectores de los llamados Gordos y los Independientes lo que hace es tensar aún más la relación interna en la CGT. El sector del moyanismo viene presionando por alguna medida de fuerza. Sin embargo, eso no implica que rompa la tregua que sostiene el conjunto de la dirigencia.
Mientras se agudizan las tensiones entre los distintos sectores de la CGT y se acelera la crisis de la conducción de la central, hoy tendrán protagonismo las calles y plazas de todo el país con las movilizaciones, que se esperan masivas, por la aparición con vida de Santiago Maldonado y reclamándole al gobierno su responsabilidad en el caso.