Ocho mineros quedaron atrapados por el colapso de una mina de carbón en el municipio Múzquiz en Coahuila, al norte de México.
Domingo 6 de junio de 2021
En pleno proceso electoral, se han encontrado hasta el momento tres cuerpos. El derrumbe de la mina ocurrió cerca de las 12:50 p.m. del viernes. Por su parte el secretario de Gobierno de Coahuila, Fernando de las Fuentes Hernández, y el fiscal general del Estado, Gerardo Márquez Guevara, se encuentran en las instalaciones de la mina de arrastre en este municipio donde quedaron atrapados.
En investigaciones preliminares, integrantes de la organización Familia Pasta de Conchos, entregaron en octubre del año pasado documentos y fotografías donde se mostraban las condiciones de inseguridad en la mina carbonera, sin recibir alguna respuesta por parte del director de la comisión federal de electricidad (CFE) Manuel Bartlett quien, dicho sea de paso, visito la mina numero 8 de pasta de conchos en compañía del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En dichos documentos se expresan las pésimas condiciones en las que laboran en las cuevas de arrastre, sin agua potable para los trabajadores que carecían del equipo de seguridad necesario por lo que muchos mineros iban en tenis, además de no haber botiquines, extinguidores ni ventilación. Y, por si fuera poco, algunos los trabajadores ni siquiera estaban seguros de estar registrados ante el IMSS.
Dos empresas que han firmado contratos con CFE, extraen carbón sin cumplir las condiciones de seguridad e higiene, si bien las recientes lluvias afectaron, las pésimas condiciones en la infraestructura de la mina, propiciaron que un tajo que estaba completamente lleno de agua colapsara en la boca de la mina en la cual ingresa el líquido.
Aun estamos en jornada electoral y ningún candidato de ninguno partido ha dado declaraciones sobre el tema. Recordemos que no es la primera vez que sucede algo como esto, a 15 años del desastre en la mina de Pasta de Conchos, en sabinas Coahuila, los cuerpos de 63 mineros –de los 65 que perecieron– permanecieron atrapados, y el magnate Germán Larrea y su empresa, Grupo México, sigue en la impunidad.