La reciente y brutal represión exige una respuesta más contundente de toda la comunidad universitaria, en especial de las y los trabajadores universitarios que hacemos posible el día a día de la UNAM.
Martes 21 de junio de 2016
Desde la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), han salido distintas voces en torno a la lucha del magisterio nacional. Académicos y especialistas han asegurado que la reforma educativa es un engaño con fines políticos.
En mayo pasado en un primer foro deliberativo llamado “La universidad que queremos”, se propuso declarar a la UNAM como territorio en rebeldía, lo que “significa que la comunidad en su conjunto debemos solidarizarnos con todas las luchas: con la CNTE, el Politécnico, la Universidad Veracruzana, las luchas indígenas y fomentar una serie de debates y discusiones sobre cómo se puede revertir la reforma educativa y las reformas estructurales que precarizan la vida social en todos los sentidos”. Ése es el llamado desde un grupo de académicos universitarios hacia la comunidad en su conjunto.
Por su parte el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), se ha pronunciado para que el gobierno federal inicie una mesa de diálogo y negociación con los maestros. Además, el pasado 14 de junio marchó en la Ciudad de México como muestra de apoyo a la digna lucha que hasta ahora ha mantenido el magisterio contra la imposición de la reforma educativa.
Sin embargo, este domingo 19 de junio el gobierno ha mandado un mensaje de cerrazón represiva, de autoritarismo y de prepotencia para imponer a toda costa su reforma neoliberal.
Ha orquestado una brutal represión en Oaxaca. De Nochixtlán, Huitxo y Hacienda Blanca veíamos imágenes que eran comparadas con la guerra de Medio Oriente. Miles de policías en las calles golpeando, amenazando, intimidando, encarcelando, disparando a los maestros y pueblo oaxaqueño, dando un saldo de por lo menos 8 muertos y cientos de heridos y desaparecidos.
Resistencia y solidaridad efectiva
Pero la represión no sólo esta presente en este estado: en cualquier lugar donde hay resistencia magisterial hay represión sistemática. Ahora mismo nuestros maestros sufren todo tipo de atropellos, incluidas las calles de la Ciudad de México donde están llevando a cabo un plantón en la plaza de la Ciudadela.
En estos momentos se hace necesario avanzar en la construcción de una solidaridad activa, combativa. Desde la agrupación Desde las Bases, llamamos a todos los trabajadores del STUNAM a sumarse a los acopios, a las movilizaciones y a contrarrestar la campaña de desprestigio mediatizada en contra del magisterio.
En el STUNAM somos un sindicato de trabajadores de la educación, nos hermana nuestra clase; son los profesores que nos enseñaron a leer y escribir, son los que les enseñan a nuestros hijos. Es necesario que la base trabajadora les exijamos a nuestra dirección, que pase de las palabras, dichas e impresas, a los hechos y que convoque a preparar un verdadero paro de labores en la UNAM en solidaridad con el magisterio.
A su vez, es fundamental que desde la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y el Frente Amplio Social Unitario (FASU), juntos a los demás sindicatos universitarios, se convoque a otras centrales sindicales que agrupan a la industria y otros servicios, como el sector salud, a que verdaderamente se pongan de acuerdo para preparar un paro nacional efectivo de apoyo al magisterio, la unidad de los trabajadores ante la represión es una necesidad urgente.
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