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Red Internacional
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FES Acatlán. Estudiantes realizan performance contra la represión

Estudiante de la FES Acatlán realizan un performance enfrente del Palacio Nacional, no solo denunciando el silencio que han tenido las autoridades ante las demandas estudiantiles, sino ante la complicidad de los medios "objetivos" de comunicación que hacen pasar esta línea represión.

Jueves 27 de octubre de 2022

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El martes 25 de octubre, alrededor de las 6:30 pm, estudiantes de la FES Acatlán realizan un performance denunciando la represión vivida por la mano de las autoridades durante el Paro Indefinido frente al Palacio Nacional.

En el llamado "Performance del silencio", les estudiantes se pintaron con sangre falsa y se amordazaron para simular que no se podía hablar, si una persona se acercaba y quitaba la mordaza esta podía hablar.

En esta actividad se buscaba representar el silencio que han guardado las autoridades como Manuel Martínez Justo y sus allegadxs frente al movimiento estudiantil y las demandas expresadas en el pliego petitorio, así como su negativa para asistir a un diálogo público el pasado 10 de octubre en las instalaciones de la FES Acatlán.

Cómo parte de la actividad, se pedía a les espectadores quitar la mordaza a algunxs estudiantes para que denunciaran a los medios de comunicación como TV Azteca, que han servido como vía para hacer pasar el discurso criminalizador de la dirección de la FES Acatlán mientras que otros medios como El Universal han guardado un silencio cómplice frente a las amenazas de muerte y amenazas de violación a estudiantes organizadxs, mientras da espacio a Manuel Martínez Justo.

Frente a esta línea criminalizadora -de la que son cómplices los medios- y ante los actos de deslegitimación del movimiento estudiantil y la omisión al intento de resolución de las demandas, la comunidad estudiantil debemos unirnos, enfrentando no solo la represión y las calumnias sino también para que por medio de la movilización y la masificación imponer nuestras demandas.

Esto de la mano de reconocer que las autoridades no son capaces de resolver nuestras demandas por su actitud negligente, es importante no tener confianza en ellas, ni en las estructuras antidemocráticas antiguas que aún hoy imperan en la universidad; por lo que tiene que ser la comunidad universitaria -docentes, estudiantes y trabajadorxs- organizada en espacios democráticos para decidir el rumbo de la universidad.