GOLPE DE ESTADO EN BOLIVIA. Exigen la libertad de los presos políticos del Gobierno golpista de Áñez

Realizamos esta acción de solidaridad nuevamente al grito de justicia por las Masacres de Senkata y Sacaba, por la defensa de las libertades democráticas que lejos de ser un regalo de algún político de turno, fueron conquistas de nuestras compañeras y compañeros, abuelas, abuelos, padres y madres, con lucha en las calles. Hoy especialmente estamos presentes exigiendo la plena libertad para las y los presos políticos, pues sabemos que el ataque contra ellos y ellas es un aviso para todas y todos los que enfrentamos este nuevo avance de la extrema derecha.
Existen más de 140 personas en las cárceles hasta el día de hoy procesadas por supuesta sedición, “vandalismo”, entre otros cargos montados por el Estado.

Denunciamos que estas detenciones irregulares constituyen parte de la campaña de persecución y amedrentamiento ejercida por el autoproclamado gobierno de Jeannine Áñez, contra todo aquel y aquella que se niegue a ignorar la creciente tendencia represiva, que si durante los 14 años del gobierno del MAS no había dejado de existir, hoy ha dado un salto innegable en la coyuntura nacional.
Denunciamos que las vulneraciones contra las y los presos políticos han llegado a extremos como las duras experiencias de tortura, de amenazas para autoinculparse, entre otras formas de amedrentamiento, negándoles todo derecho al debido proceso, como es de esperarse de esta justicia capitalista, racista y patriarcal. Han usado a personas con discapacidad, menores de edad, mujeres que cargan solas con sus wawas, jóvenes y personas adultas como botín de guerra a tiempo de aplicar “mano dura”.

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La extrema derecha, detrás de la cual están visiblemente el imperialismo de Trump y otros como Jair Bolsonaro en América Latina, no han logrado disfrazar el golpe de Estado de “democracia”, después del ingreso de la Añez al palacio de gobierno de la mano de los militares y la Iglesia, la quema racista de la wiphala y las patadas a mujeres de pollera, de dos brutales masacres y la persecución política, no solo contra militantes del MAS, sino contra toda la oposición por izquierda, como lo ejemplificó la detención de nuestro corresponsal de La Izquierda Diario y el compañero artista solidario con Senkata; después de la militarización de las calles, ataques de grupos paramilitares y declaraciones como las de Camacho, admitiendo su influencia en los motines. También repudiamos enfáticamente la cacería de brujas desatada contra militantes del Movimiento Al Socialismo e incluso simples funcionarios de su gobierno, realizadas con revanchismo y fuera inclusive de toda legalidad burguesa, porque si bien no le prestamos apoyo político al MAS, este hecho es una alerta extensiva a todo lo que se oponga a la ofensiva derechista.

Frente a esta arremetida, la juventud y las mujeres de pollera han estado y permanecen a la cabeza de la resistencia, poniendo el pecho frente a las balas militares que han corrido en las calles para acallarnos. Mientras nosotras y nosotros gritábamos que ¡Con nuestros muertos no se negocia!, los parlamentarios del MAS y la oposición han pactado dándole una mascarada de legalidad a este desastre; esto es resultado del empoderamiento de la derecha durante más de una década.

Además, ha sido nada más y nada menos que la burocracia de la Central Obrera Boliviana (COB), quien ha dado uno de los primeros pasos cediendo a los golpistas.
Esta traición de las burocracias sindicales, que si no han huido, nos han entregado en bandeja de plata a la ultra derecha, nos deja lecciones fundamentales para avanzar de manera independiente de todos los partidos burgueses, apostando por la renovación de nuevos dirigentes que hayan luchado y combatido consecuentemente durante este tiempo, así como por la recuperación de todas nuestras instancias de organización y representación. A este golpe se ha sumado también de manera vergonzosa el magisterio urbano de La Paz (URMA a la cabeza del POR), que han demostrado hoy no tener un pelo de izquierdistas y menos de trotskistas.

Hoy, en una coyuntura de brutal represión es fundamental organizarnos porque lejos de poder resolverse en las urnas, vamos a mayores conflictos por el programa histórico patronal, capitalista, racista, colonial y machista que tiene esta ultra derecha, dando en esto también un salto cualitativo respecto a lo que ya veníamos enfrentando.

Desde la Liga Obrera Revolucionaria (LORCI) y desde las agrupaciones que impulsamos junto a numerosos compañeras y compañeros independientes como la Agrupación de Mujeres Pan y Rosas y el organismo de Derechos Humanos ProDHCre (Profesionales por los Derechos Humanos y contra la Represión Estatal) venimos combatiendo la asonada derechista y el golpe de Estado, desde el primer día. Reiteramos la disposición de toda nuestra fuerza militante así como nuestra prensa independiente, La Izquierda Diario Bolivia (e internacional), al servicio de la resistencia, lucha contra los atropellos fascistas y por un verdadero horizonte socialista.

Sabemos que vienen por todos los elementales derechos que la clase trabajadora, las mujeres, las diversidades sexuales, los pueblos indígenas y campesinos hemos obtenido a costa de sudor y sangre, pues el golpe de Estado, lejos de ser contra una cúpula política, es contra el pueblo ¡El golpe es contra el pueblo! Llamamos a todos estos sectores y a quienes deseen defender sus derechos y enfrentar esta brutal coyuntura represiva, a no dejar de organizarnos juntas y juntos, como venimos haciendo, y ganar una enorme y mayor fuerza, pues es la única forma en la que podremos enfrentar esta nueva arremetida. Solo la movilización podrá poner en libertad a nuestras compañeras y compañeros presos políticos que necesitan de todo el apoyo ante esta terrible injusticia.

¡Justicia para las masacres de Senkata y Sacaba!

¡Libertad plena para las y los presos políticos!

¡No negociamos con nuestros presos! ¡No negociamos con nuestros muertos!

¡Por la defensa de las libertades democráticas, el derecho a la libertad de expresión y la protesta social!

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