Este sábado, la policía del estado de Oaxaca reprimió a un grupo de manifestantes al finalizar la "Marcha calenda contra la gentrificación". Entre los detenidos hay activistas feministas y defensores de los derechos humanos indígenas y migrantes. Colectivos denuncian criminalización de la defensa del territorio y la hipocresía de Salomón Jara, titular de la entidad gobernada por Morena.
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Domingo 28 de enero
Portada: Oaxaca Media
Este sábado, al finalizar la "Marcha Calenda contra la gentrificación", policía del estado de Oaxaca detuvo a por lo menos seis activistas. Los videos, que muestran la brutalidad de estas detenciones, han generado indignación y el rechazo a la represión de quienes protestan contra el saqueo y el desplazamiento por violencia económica.
Filadefo Deciderio, miembro de la Comedora comunitaria Nkaaymyujkeme, Nizayé de la Colectiva Jurídica por la Dignidad Disidente Asesoría Jurídica y Psicoterapia (COJUDIDI), Metztli Jiménez de la colectiva La Campamenta y al menos tres personas más fueron trasladados al cuartel estatal de San Bartolo Coyotepec.
"El gobernador "indígena" que está "reparando la deuda histórica con los pueblos" y atendiendo las carencias de los pobres, mandó a sus policías a reprimir una protesta contra la violencia hacia las mujeres, el despojo gringo y la gentrificación", denuncian colectivos locales.
Tras la detención, activistas y colectivas llamaron a concentrarse en el cuartel estatal de San Bartolo para exigir la libertad inmediata e incondicional de los detenidos. A través de redes sociales denunciaron el hostigamiento por parte de elementos de la policía estatal contra quienes permanecían a las afueras del cuartel.
Este domingo continúan las muestras de repudio a la represión y la denuncia de la creciente criminalización de la defensa del territorio en la entidad.
Desde La Izquierda Diario México nos pronunciamos en solidaridad con la lucha de la población oaxaqueña contra el despojo y la depredación inmobiliaria así como con la exigencia de libertad absoluta, inmediata e incondicional a los detenidos por protestar.