Movimiento Estudiantil. Implementan baño mixto en la FES Acatlán

A inicios de año, comenzaron a circular fotos que mostraban que en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán habían implementado Baños mixtos, los cuales se encuentran en el último piso del edificio A8, que conecta con el A7.

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Esta política de la dirección tiene que ver con cómo se respondió al movimiento del semestre pasado, donde las autoridades se negaban al diálogo convocado por estudiantes y profesores. La política frente a la violencia de género era bastante discutida en las asambleas y al interior del paro, durante el cual se impulsaron talleres y conversatorios, así como también se hicieron murales con respecto al tema ( en el edificio A4, en los baños del A15 y en la Biblioteca).
Desde los primeros días del paro, en la planta baja del edificio A10, que conecta con el A9, se colocaron las banderas trans y no binaria, que indicaban la aplicación de baños neutros.

Si bien esta medida no fue discutida en las primeras asambleas, sí fue algo que se ratificó y se votó defender en las siguientes, a través de votaciones presenciales y en línea, defendiendo el derecho de la comunidad LGBT+ de tener espacios seguros.

Cuando terminó el paro, las autoridades de la Facultad se esforzaron por quitar todo el rastro de la organización estudiantil, que contaba con apoyo de profesores y trabajadores, gestado en el último mes, por ejemplo, se tradujo en borrar todos los murales de la comunidad y, con ello, eliminó a los baños neutros. Fue una clara muestra de que la dirección no pretende permitir ni un centímetro de pared a la organización estudiantil independiente.

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Los últimos años, la comunidad ha mostrado voluntad por luchar por esos espacios seguros, por ejemplo, el semestre pasado, lxs estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras votaron en una asamblea tomar un baño para volverlo neutro. Las autoridades de toda la universidad han leído esto y han tomado medidas en distintas escuelas: FES Iztacala con un baño mixto en el 2018, otro en FES Aragón en el mismo año, un baño neutro en la Facultad de Química en el 2022 y otro en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Oriente –un caso parecido al de Acatlán- este 2023.

Hoy, la FES Acatlán tiene un baño mixto. Si bien es una concesión a la demanda, las autoridades esperaron a este semestre para que no sea visto como un triunfo del movimiento del semestre pasado. Además, es bien sabido las políticas antiLGBT+ que las autoridades tienen: el semestre pasado, un coordinador de carrera fue visto mientras arrancaba carteles por el Día Internacional de la Visibilidad Trans. Esto se amplía al resto de la universidad, por ejemplo, en marzo hubo una protesta afuera de la Rectoría en Ciudad Universitaria en contra de los discursos de odio a raíz de un foro virtual organizado por el el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH)

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Frente a la política de las autoridades que intentan mostrar una cara receptiva ante las preocupaciones de estudiantes, profesores y trabajadores, mientras tienen discursos de odio, es necesario discutir un plan integral contra la violencia, que se plante en contra de la precarización laboral y de la educación, por conquistar plenos derechos laborales y que se garanticen condiciones dignas de estudio –una universidad de y para el pueblo pobre y trabajador- donde la comunidad, con independencia de las autoridades, decida qué tipos de espacios y dónde los necesita.

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