El miércoles pasado cooperativistas se manifestaron en el municipio para conseguir mejores condiciones de trabajo y que se trate se propuesta de llevar adelante un proceso de reciclado con inclusión social. Exigieron también que se los reconozca como esenciales y que se regularicen sus tareas.
Lunes 26 de octubre de 2020 10:52
El miércoles 21, después de enviar numerosas solicitudespara tener una reunión con el intendente de Junín, Pablo Petrecca y sin tener respuesta por parte del mismo, ni de ningún otro funcionario, las y los trabajadores de la cooperativa Las Marías decidieron concentrar en el municipio para expresar su reclamo. Allí fueron recibidos por un importante número de agentes policiales.
Finalmente consiguieron reunirse con dos funcionarios, el secretario de seguridad, Andres Rosa y el director de seguridad, Luis Chami. Según denunciaron los trabajadores, tanto un militante del MTE como un trabajador de la cooperativa, fueron recibidos con improperios y una actitud de "apriete" por parte del director de seguridad. Afirmaron también que los funcionarios buscaban desviar el objetivo del reclamo y provocar el repudio a la protesta.
Incluso el referente local de Juntos por el Cambio no tardó en expresarse en las redes sociales, calificando el accionar de los cooperativistas como violento, cuando solo fueron a expresar la necesidad de tener mejores condiciones de trabajo, en medio de una crisis sanitaria y económica que se agudiza día a día.
Lamentamos lo que sucedió hoy en nuestro municipio.
Como siempre lo hicimos, apostamos al diálogo como forma de buscar soluciones para los vecinos. La violencia y la extorsión no solucionan los conflictos, sino que generan todo lo contrario. pic.twitter.com/IenYsGtjBF— Pablo Petrecca (@petreccapablo) October 21, 2020
¿Qué reclamaban? Las y los trabajadores del relleno sanitario exigen que el municipio los reconozca como trabajadores esenciales, para lograr una regularización de sus tarea. En el mismo sentido, pidieron que se trate el proyecto presentado por ellos mismo el 17 de febrero del 2020, que consiste en la puesta en funcionamiento de un proceso de reciclado con inclusión social, financiado por el mismo municipio.
Dicho proyecto consta de cuatro etapas: la primera es de Promoción Ambiental, en la cual las mujeres que ya están capacitadas recorrerían la ciudad enseñando a las y los vecinos a separar en origen los residuos.
La segunda etapa sería la de Recolección de los residuos ya separados, esta tarea se dividiría por zonas, para luego pasar a la etapa de Transporte hacia la planta de clasificación y acondicionamiento, en la cual los trabajadores en el galpón de acopio realizarían la tarea de prensado. En la última etapa los residuos ya clasificados pasarían a la venta en industrias, para reinsertar el producto reciclado en el mercado.
Esta propuesta surge a partir del ejemplo de otras ciudades, como Lincoln, Tandil, La Matanza, que ya realizan estas actividades en fases y que conforman la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores. El proyecto presentado se ampara en la ley 13.592 que refiere a la gestión integral de los residuos sólidos. Al ser provincial obliga a todos los municipios a atender la situación informal de las y los trabajadores de este sector.
En síntesis, después de seis meses sin respuesta por parte del municipio y luego de la movilizacion, lograron reunirse con el intendente, que se abra una mesa de diálogo tripartita, donde la gestión del relleno sanitario sea llevada a cabo por las y los trabajadores recicladores del relleno, por una empresa privada y por el municipio, y que se comprometan a aportar un galpón para el acopio, que ya está en funcionamiento.