Hace 48 años, en febrero de 1971, terminaba una de las luchas de gran trascendencia durante el franquismo en Barcelona: la huelga de 62 días de los trabajadores y trabajadoras de la fábrica de accesorios de automóvil Harry Walker. Desde el 2 al 15 de marzo, una exposición en la Marquesina de la Via Júlia (Barcelona), hará honor a esta gran gesta.
Lunes 2 de marzo de 2020
Esta huelga, que había comenzado en diciembre de 1970 hasta febrero de 1971, con la ocupación de la fábrica, manifestaciones y cajas de resistencia, había sido tan combativa que, al día de hoy, en el barrio de la Prosperitat de Nou Barris una placa le hace honor con la leyenda “Plaça de les treballadores i treballadors de la Harry Walker”.
En esta década la conflictividad obrera, lejos de ser pacífica, se acrecentaba en su radicalización, combatividad y politización; abriéndose puentes entre las reivindicaciones sindicales y las demandas políticas producto de la actuación constante de las fuerzas represivas y de la dureza de las patronales.
En aquellos años en la Harry Walker trabajaban 470 personas bajo ritmos de producción de extrema explotación y en condiciones inhumanas bajo el humo y el calor de la fundición. Mientras, la patronal exigía más horas extras sin pagarlas y pretendía bajar las condiciones laborales aún más pasando de contratos indefinidos a temporales.
Este cúmulo de factores había ido acrecentando la rabia y, a la vez, las fuerzas para organizarse. Las trabajadoras y los trabajadores comenzaron a realizar paros parciales y asambleas, que se iban incrementando desde septiembre a diciembre de 1971 siendo casi diarios. La patronal respondió con sanciones y amonestaciones. Una octavilla original de la época nos lo relata:
“¡LLAMAMIENTO A LOS TRABAJADORES Y A LA OPINIÓN PÚBLICA BARCELONESA!
Realizad asambleas y paros, por vuestras reivindicaciones y en solidaridad con HARRY-WALKER. Nuestro triunfo será el vuestro, porque nuestras reivindicaciones son las vuestras:
- READMISIÓN DE LOS DESPEDIDOS
- FUERA SANCIONES
- AUMENTO SALARIAL DE 3.000 PTS. IGUAL PARA TODOS
- SUPRESICÓN DE LOS CONTRATOS EVENTUALES
Asamblea de Trabajadores de Harry-Walker. Barcelona 11 de enero de 1971”[1]
Otra octavilla da cuenta de la represión que sufrieron por parte de la policía franquista, mientras denunciaban cómo trabajadores de otros conflictos del mismo año sufrían la misma situación. Las reivindicaciones son claramente contra la represión policial y patronal, con la complicidad directa de la CNS (Central Nacional Sindicalista), es decir, los “sindicatos verticales”:
“Cuando iniciamos nuestra huelga la empresa por sí sola no podía frenar nuestra lucha y recurrió inmediatamente a la POLICÍA (apoyados por la CNS y la Delegación del Trabajo).
Para facilitar este trabajo de represión los capitalistas nos han impuesto un ESTADO DE EXCEPCIÓN cuyas repercusiones sobre la clase obrera estamos sufriendo día a día: desalojo masivo de las fábricas, despidos, registros de nuestras casas, detenciones, largos interrogatorios con torturas en los calabozos de Vía Laietana. (…)
Después de despedir a 33 compañeros y mandar a deter a 7, han visto que seguimos dispuestos a mantener la lucha. El miedo a nuestra lucha es lo que les está obligando a mantener desde hace tres meses a la policía en la fábrica para cargar contra nosotros cuando luchemos por conseguir nuestras reivindicaciones.
Esta misma situación están sufriendo nuestros compañeros de MACOSA, MAQUINISTA; PEGASO, SEAT, ETC. porque ellos también se han lanzado a la lucha. (…)
ABAJO EL ESTADO DE EXCEPCIÓN
LIBERTAD PARA LOS DETENIDOS
FUERA LA POLICÍA DE LAS FÁBRICAS.
Obreros de Harry-Walker” [2]
Este conflicto ha sido muy apoyado por otros sectores de trabajadores y trabajadoras, tal como lo expresa otra octavilla en la que se publican los fondos de la caja de resistencia, donde aparecen 84 fábricas con la información detallada del aporte de cada una, con un encabezamiento que decía:
“La lucha de los trabajadores de Harry-Walker ha suscitado un movimiento de solidaridad económica, en Barcelona y Catalunya. En relación a las empresas que han recogido dinero para apoyar nuestra lucha nos da una idea de quienes sienten la solidaridad obrera. COMPAÑEOS, NO ESTAMOS SOLOS. Y pasa a detallar....acabando con ¡QUE NO NOS VENZAN POR HAMBRE!.
Asamblea de los trabajadores de Harry-Walker. Barcelona, 2 de enero de 1971”-[3]
Las trabajadoras y los trabajadores consiguieron algunas mejoras laborales, aunque con 16 trabajadores despedidos. La gran huelga de la Harry Walker de Nou Barris, había sentado un precedente importante en la conflictividad obrera contra el franquismo y durante los años de la transición. Un precedente que marcó una nueva etapa de luchas hacia el año 1973, cuando se fue incrementando de manera espectacular la conflictividad obrera, “sobre todo considerando las horas de trabajo perdidas, que pasaron de 4.692.925 en 1972 a 8.649.265 según el Ministerio de Trabajo, y de 7.469.400 a 11.120.252 según la OSE.” (Molinero Carme, Ysàs, Pere, 1998).
Hasta mitad de la década de 1970, a nivel estatal este proceso de radicalización había tenido un costo de varios luchadores asesinados por las fuerzas policiales además de una gran cantidad de presos, a tono con la situación de radicalización social y política que reinaba en esta década y que aumentaba a partir de 1975.
La represión patronal y policial, marcaron el carácter de este proceso en el que, como expresó la Harry Walker, junto a la radicalización de la propia lucha, se radicalizaban y politizaban también las demandas laborales. Muchos historiadores de esta época hablan de la dinámica de “acción-represión-acción” en Catalunya. La represión no lograba paralizar la organización obrera, si no que, por el contrario, ésta se intensificaba y extendía de una fábrica a otros sectores.
La larga huela de la Harry Walker ha sido uno de los conflictos pioneros de la clase trabajadora catalana, y como decían en una octavilla, se identificaban como “una escuela viva para la clase obrera”. Una conflictividad que cuando llegó al año 1975, la Barcelona desafecta mostraba una enorme radicalidad obrera, con huelgas, ocupaciones de fábricas y manifestaciones que tejían poderosas alianzas con el movimiento estudiantil y el movimiento vecinal. Rescatar experiencias como estas es una tarea militante imprescindible para las generaciones actuales, porque no empezamos de cero.
Transcripción de las octavillas originales, manteniendo su ortografía, extraídas del Pavelló de la República:
[1] Octavilla Asamblea de Trabajadores de Harry Walker, “¡LLAMAMIENTO A LOS TRABAJADORES Y A LA OPINIÓN PÚBLICA BARCELONESA!”, Archivo Biblioteca Pavelló de la República, FV.1971/4.
[2] Octavilla de los OBREROS DE HARRY WALKER, sin título, Archivo Biblioteca Pavelló de la República, FV.1971/4.
[3] Octavilla de la Asamblea de los trabajadores de Harry-Walker. Barcelona, 2 de enero de 1971, Archivo Biblioteca Pavelló de la República, FV.1971/4.