Aniversario. Luca Prodan: la leyenda del rock nacional cumpliría 67 años

Hace 67 años nacía en la ciudad de Roma. Luca George Prodan fue el tercero de cuatro hermanos, en el seno de una familia acomodada que, tras sobrevivir a la Segunda Guerra Mundial, decidió radicarse en la antigua ciudad italiana.

“Yo canto en inglés, men, pero soy italiano. Y las Malvinas son italianas. Por eso tengo un colador en la cabeza: porque los italianos van a bombardear con fideos.” sería una de sus frases que trascendería varias generaciones. Quién conoce a alguien que lo haya visto en vivo, que haya sido fanático, que conozca sus historias, tiene nuestra atención.

Allí creció junto a sus hermanos, donde cursó la escuela primaria en un prestigioso colegio, para luego vivir sus años de secundaria en el Reino Unido, en Gordonstoun de Escocia: uno de los colegios más caros y elitistas de Europa donde asistía, por ejemplo, el príncipe Carlos de Inglaterra.

Pero su personalidad no encajaba en ese ambiente, del que aseguraba haber salido “loco”. Con 16 años y a falta de un año para finalizar sus estudios decidió escaparse del instituto para nunca regresar. Buscado por Interpol a pedido de su familia, Luca recorrería Europa y sería encontrado en Roma.

La década del 70 lo encontró en Londres donde comenzó su actividad como músico, influido por la estética punk de la época y la influencia del reggae y el dub, dos géneros que marcaron a la época en Gran Bretaña. Pero también comenzaría un camino vertiginoso, en donde la adicción a la heroína y el suicidio de su hermana lo marcarían a fuego.

“La sociedad quiere que seas una marioneta, cuanto más famoso y mejor es el colegio, más marioneta vas a salir o sino más loco… yo salí loco”. Luca Prodan

En 1981 Luca llega a la Argentina, por intermedio de un Timmy McKern, un amigo de su adolescencia que se encontraba viviendo en las sierras cordobesas. McKern no sólo fue el responsable de meterla la idea en la cabeza de radicarse allí, sino que también fue, sin saberlo, el padre de una de las más trascendentes historias de la música nacional cuando le presentó a su cuñado: Germán Daffunchio. Un vecino también se se sumaría al grupo de amigos, motivado por su amor a la música. Nada más ni nada menos que Alejandro Sokol.

Eran los últimos años de una dictadura decadente y una represión que también había dejado secuelas enormes en el mundo del arte y de la cultura. En ese contexto, en las sierras de Córdoba, se daban los inicios de lo que luego sería Sumo. La historia que siguió después, se cuenta sola.

Ícono del Abasto en Buenos Aires, supo retratar las imágenes de aquel viejo barrio porteño como pocos. La crítica, la ironía y el humor dominaban muchas de sus canciones. La crítica antimiperialista, el combate al racismo, la burla y el desprecio a la frivolidad, el amor por "la gente despierta" y sencilla, son algunos de los temas que recorren sus canciones y que aún hoy, a 32 años de su muerte, están más vivas que nunca.

«Aprieto los dientes, miro a los dementes
Aprieto los dientes, miro a los dementes
why donde estas vos, why donde estas vos?
Hay minas why minas why minas why minas
why donde estas vos, why donde estas vos?
El ojo blindado que me has regalado
El ojo blindado que me has regalado
Me mira mal, me mira mal
Ojo blindado»

“Un músico tiene la música en el corazón” gustaba decir y dejaba un poco de su forma de ser, de pensar y de sentir, en cada una de sus letras. "Luca vive" puede leerse al día de hoy en graffitis, banderas, remeras y tatuajes, en cada recital de rock y en muchos de los documentales que intentan reconstruir la vida de uno de los íconos más grandes del rock en Argentina. Quizá ninguno lo haya logrado tan bien como la película "Luca", dirigida por Rodrigo Espina y estrenada en 2008 con documentos históricos como las cintas de cassette que Luca grababa y enviaba a su familia en Gran Bretaña, entrevistas a su madre, su hermano Andrea Prodan,
a Germán Daffunchio, Stephanie Nuttal (primer baterista de Sumo) y Timmi McKern, entre otros.