Como una paradoja del destino, uno de los músicos europeos más cálidos y latinoamericanos que se conozcan nació el día que en el hemisferio sur comienza el invierno. En 1961 para ser exactos, aunque en su París natal comenzaba -como cada 21 de junio- un nuevo verano.
Augusto Dorado @AugustoDorado
Martes 21 de junio de 2016
Foto: Pilar Ariza
José Manuel Arturo Tomás Chao Ortega, tal su extenso nombre completo, hoy suma 55 giros alrededor del sol aunque más se conocen sus giras alrededor del planeta como Manu Chao.
De madre vasca y padre gallego, Manu adquirió nacionalidad francesa porque su familia fue empujada al exilio por la dictadura franquista. Pero como su propia carrera lo demuestra, nunca tuvo apego a territorios ni nacionalidades. Volando viene, volando va. Abrazó el arte en la calle (como músico callejero) y lo desarrolló de la misma forma, de manera itinerante y sin someterse a ritmos ni requisitos impuestos por discográficas o personajes ajenos a la música.
Tras pasar por varias bandas, en 1987 funda junto a su hermano Antoine Mano Negra (nombre inspirado en una organización anarquista clandestina del siglo XIX). La banda tuvo un muy bien recibido debut con el disco Patchanka cuyo original sonido fue marca registrada e influyó en innumerables bandas de fines de los ´80 y principios de los ´90 y que se sintetizó en el mote de “alterlatino” (Fabulosos Cadillacs y Todos Tus Muertos de los ´90, Café Tacuba, etc). Una mezcla bien equilibrada de punk, hip hop, ritmos latinos varios, reggae, ska y sonidos arábigos.
Mala vida:
Entre los primeros éxitos se destacan “Mala Vida” (con un muy bien logrado videoclip estilo película muda) y “King Kong Five” (del segundo disco Puta´s Fever), tema con el que llegaron a las cadenas musicales de TV como MTV o Much Music.
King Kong Five
Luego de su tercer disco King of Bongo, la banda se sumergió en una gira sin demasiada producción y con mucho de espíritu de aventura (casi “mochileros”) por Latinoamérica, que quedó registrada en el documental Amérika Perdida. Por esos años llegaron por primera vez a Argentina, en julio de 1992, con un recordadísimo show en Obras Sanitarias: recordado por las poquísimas personas que lo presenciaron pero magnificado por todas las que dicen haber estado. Es que el show fue tan descollante que se transformó en un mito, potenciado por la irrupción televisiva de Mano Negra en el programa de televisión “Hacelo por mí” de Mario Pergolini en el que rompieron un monitor y descontrolaron como nadie lo había hecho antes en un estudio de TV.
Señor Matanza
El último disco de Mano Negra post gira latinoamericana, Casa Baylon (1994), se ganó el calificativo de clásico por temas como “Señor Matanza”, “Santa Maradona” o “La Vida” (interpretado junto a Fidel Nadal), pero sobre todo porque captó el espíritu de época en este rincón del planeta: abre con “Viva Zapata”, justo en el año del levantamiento de los indígenas en Chiapas (México) y de las primeras revueltas contra los planes imperialistas y las consecuencias de la economía de mercado. Logró incorporarse a la banda de sonido de esa época.
Santa Maradona
Esas temáticas y ese sonido perduraron en la posterior carrera solista de Manu, tras la separación –un poco traumática- de Mano Negra. Le costó algunos años retomar su rumbo artístico pero el resultado no podía ser mejor: su debut solista Clandestino (1998) tuvo todavía mayor repercusión que sus trabajos con Mano Negra. Aunque el tono pasó a ser más íntimo y suave, el punto de vista seguí siendo crudo ante problemas sociales como el de la inmigración.
Clandestino (en vivo)
Por esos años comenzaba a desarrollarse el movimiento anti-globalización en la juventud y Manu fue parte activa de distintos aspectos de ese tipo de movimientos, tomando banderas como la de la legalización de la marihuana.
Desaparecido
Le siguieron unos cuantos discos en la misma línea: Próxima Estación… Esperanza, Radio Bemba Sound System, La Radiolina, entre otros. Pese a la búsqueda permanente, la constante siguió siendo la independencia y la ambición artística por sobre cualquiera de otro tipo.
Me gustas tú
Me llaman calle
Como postal de su compromiso se puede mencionar el recordadísimo recital por los 10 años de FASINPAT (fábrica Cerámica Zanón bajo control obrero), otro hito en su carrera.
Entrevista Manu Chao en FASINPAT
Hoy suma 55 y esperamos muchos más de Manu, que nos está dando buena vida a quienes tenemos esperanza en un arte independiente y comprometido.