Mario Moreno dejó un legado de más de 40 películas, algunas de las mejores del cine nacional, además fue incluido en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española por la manera de hablar de su personaje "Cantinflas".
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Martes 20 de abril de 2021
El 20 de abril de 1993 fallecía Mario Moreno “Cantinflas” en la Ciudad de México tras complicaciones por el cáncer que sufría. A su funeral asistieron miles de personas que despedían a una de las últimas estrellas de la Época de Oro del Cine Mexicano.
La importancia de su personaje radica en que pudo retratar a la clase baja de la Ciudad de México de principios del siglo XIX, sus expresiones y maneras de buscar sobrevivir en una sociedad que se construía tras la Revolución Mexicana; algunos lo llamaron el “Chaplin de México”.
Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes nació el 12 de agosto de 1911 en la colonia Santa María la Rivera en la capital mexicana, muy cerca del barrio de Tepito. Fue el sexto de ocho hermanos del matrimonio formado por el cartero Pedro Moreno Esquivel y María de la Soledad Reyes Guízar.
El también llamado “Mimo de México” ejerció de joven en diversos oficios: zapatero, bolero, cartero, taxista, boxeador, incluso torero. Entró al Ejército Mexicano pero su padre pidió su baja por ser menor de edad.
Fue en las carpas de los barrios pobres de la ciudad donde Mario encontró su lugar. Empezó a trabajar haciendo pequeñas apariciones. En ese medio conoce a la moscovita Valentina Ivanova Zuvareff con quien se casa en 1934, será su compañera de vida.
Personaje
En el ambiente de las carpas se forjará y bautizará su personaje “Cantinflas”, un reflejo de las clases bajas que abundan en las urbes, que intentan sobrevivir con algo de picaresca, trabajado en las más diversas actividades, con mucha mala suerte, pero con un buen corazón y solidaridad entre sus pares.
Al principio el personaje tenía la cara pintada. Al pasar al cine le quitó esa característica pero mantuvo su atuendo; pantalones a la cadera sostenidos por un lazo o unos viejos tirantes, ropa arrugada y desgastada, viejos zapatos, una pañoleta deshilachada, un sombrero o cachucha en pedazos y un atisbo de bigote.
El cómico ya había tomando características del habla mexicana, una entonación de barrio, donde ganaba las disputas más por confusión que por convencimiento. Esta manera de hablar lo hizo llegar al diccionario de la Real Lengua Española, que incluyó entre sus páginas la palabra cantinflear y cuya definición reza: “Hablar o actuar de forma disparatada e incongruente y sin decir nada con sustancia.”
Cine
En el séptimo arte es donde Mario Moreno dejará su huella. “Cantinflas” como personaje se perfiló en sus trabajos de finales de los años treinta. Su primera participación en la pantalla grande fue en No te engañes corazón (1936) dirigida por Miguel Contreras Torres, desempeñó un personaje secundario, Canti, un vagabundo desaliñado que busca obtener unos pesos. En esta cinta comparte créditos con Sara García.
En Así es mi tierra (1937) del director moscovita Arcady Boytler, Mario Moreno interpreta al Tejón, un pícaro hablantín que intenta ganarse la simpatía del general revolucionario recién llegado al pueblo. En Águila o sol (1937) Mario interpreta a un actor de carpa quien realiza números cómicos con su comparsa, que era el actor Manuel Medel. Aquí se observa el característico atuendo del personaje en el escenario del teatro aún con maquillaje y su peculiar manera de hablar.
El signo de la muerte (1939) dirigida por Chano Urueta, con un argumento de Salvador Novo y música de Silvestre Revueltas, “Cantinflas” aparece junto con Medel como protagonistas de una comedia de enredos.
¡Ahí está el detalle! (1940) de Juan Bustillo Oro, se presenta como protagonista a Mario Moreno “Cantinflas”, al lado de Joaquín Pardavé y Sara García, es aquí donde se perfila el personaje desde los créditos con la silueta peculiar hasta la actitud de un pícaro que va de problema en problema por su manera de expresarse. La cinta, una de las mejores del actor, fue restaurada por la Filmoteca de la UNAM, la Cineteca Nacional y Fundación Televisa.
Ni sangre ni arena (1941) de Alejandro Galindo, presenta ya como un artista exclusivo a “Cantinflas”. Es fotografiada por Gabriel Figueroa. El gendarme desconocido (1941), dirigida por Miguel M. Delgado, es cuando el personaje se convertirá en el agente 777. A partir de ese momento Mario Moreno se hace parte de la llamada "Época de Oro" del cine mexicano.
En 1946 firma un contrato con la Columbia Pictures, que lo llevó a trabajar en Hollywood en la película La vuelta al mundo en 80 días (1956) al lado de David Niven. Por este trabajo Mario Moreno obtiene el Globo de Oro. Sería la mejor época del “Mimo de México”, tiene proyección internacional y es el ídolo indiscutible en el país. Fue nombrado presidente honorario del Club América, del cual era fanático.
Moreno rodará su último largometraje El barrendero en 1981. Para ese entonces el personaje “Cantinflas” había realizado más de 40 largometrajes y ejercido diversos oficios y profesiones: científico, conserje, profesor, cura, doctor, bolero, bombero, piloto, adivino, embajador, boticario, entre otros. También se realizaron tiras cómicas del personaje y series animadas para televisión tanto en México como en los Estados Unidos. Grabó un disco de canciones infantiles sin mucho éxito.
Sindicalismo
Mario Moreno entró en 1944 al Sindicato de Trabajadores de la Industria Cinematográfica (STIC), fundado en 1919 con el nombre de Unión de Empleados Confederados del Cinematógrafo.
Para mejorar las condiciones laborales de los agremiados, Moreno encabezó una huelga al lado de Jorge Negrete y Arturo de Córdova. Moreno desafío al líder de la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM), Fidel Velázquez, incluso en reuniones con el presidente Manuel Ávila Camacho, cuando buscaban solucionar un conflicto por la titularidad de los contratos en la industria cinematográfica.
Mantendría diferencias con Córdova por la dirección de la Asociación Nacional de Actores (ANDA) en un tiempo donde las luchas sindicales de dirimían a balazos.
El actor y empresario tuvo una visión conservadora, pero su raigambre popular siempre lo hizo ver por los desprotegidos. Se mostró contra el charrismo sindical, que manejaban el gobierno de un sólo partido el PRI.
Moreno fue presidente de la ANDA y secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Producción Cinematográfica (STPC). En su retiro el actor se dedicó a ayudar en asociaciones de beneficencia, especialmente las dedicadas a niños y niñas. Fundó la Casa del Actor que lleva su nombre como espacio para el retiro de los trabajadores del espectáculo.
Vida personal
El matrimonio Moreno-Ivanova no tuvo hijos biológicos, así que adoptan a un bebé de tres meses que sería bautizado el 8 de diciembre de 1960 como Mario Arturo, en ese momento la felicidad parece absoluta y se desviven por el pequeño.
La madre del infante, una joven estadounidense llamada Marion Roberts, se suicida en 1961. Valentina Ivanova Zuvareff fallece en enero 1966, debido al cáncer en los huesos que padecía, habían estado casados 32 años.
Tras la muerte de su padre, Moreno Ivanova se enfrasca en una batalla legal con su primo Eduardo Moreno Laparade, por los derechos sobre 39 películas. El proceso se llevará en tribunales más de 20 años donde a Eduardo le ceden las regalías de las cintas cuyos derechos detenta Columbia Pictures, además que asume el control del patronato de la Casa del Actor Mario Moreno.
Moreno Ivanova contrae nupcias con Tita Marbez, la pareja funda una empresa con el nombre de Cantinflas para comercializar su imagen. En 2016 vendieron los derechos a Televisa para realizar una bioserie sobre la vida de Mario Moreno Reyes.
Legado
Muchos años han pasado de la desaparición del gran cómico mexicano, han muerto ya sus seres más cercanos, su hijo Mario Arturo falleció en 2017 a la edad de 56 años y su sobrino Eduardo murió el pasado 20 de febrero en un hospital mientras recibía atención medica por contraer Covid-19.
Tras la muerte de su marido, Tita Marbez mantuvo los derechos de la imagen de Cantinflas, realizó un proyecto con el parque de diversiones La Feria de Chapultepec, el cual fue cerrado en 2019 tras un trágico accidente. Se espera que el próximo año se reabra el parque con la una sección inspirada en el “Mimo de México” y dedicada a los niños.
Por su parte, Moreno Laparade mantenía un pleito legal desde 2020 con el actor Jesús Ochoa y secretario del Comité Ejecutivo de la ANDA por la administración de la Casa del Actor, incluso Jorge Ortiz de Pinedo, miembro del patronato, aseguró que la institución se encontraba sin recursos.
Mario Moreno “Cantinflas” dejó su impronta en la cultura mexicana y en el lenguaje. Si bien su personaje cambió al paso del tiempo hasta llegar hacer películas que podría pensarse eran por encargo, como el caso de El señor doctor (1965) que se desarrolla en el recién inaugurado Centro Médico del Seguro Social, el cual fue uno de los más afectados en el sismo de 1985, o en El patrullero 777 (1978) donde da un discurso sobre lo que “debería” ser un buen policía, mostrando un rasgo de conservadurismo y confianza en las instituciones.
El mausoleo donde descansan los restos del “Mimo de México”, y de su nieto Mario Patricio, se encuentra en el Panteón Español ubicado al poniente de la Ciudad de México. Es visitado por seguidores del comediante en fechas emblemáticas, y es que la imagen de Mario Moreno sigue presente en el imaginario colectivo.
En enero pasado dos tiktokers visitaron una casa a la orilla del mar en el puerto de Acapulco, que fue propiedad de Mario Moreno. El inmueble se encuentra abandonado, lograron captar imágenes de una estatua de Cantinflas. Tita Marbez comentó al respecto en medios que la casa no pertenece a la familia Moreno.
Con información de: El Heraldo de México, Grupo Imagen, El Universal, Club América.
