Rechazamos categóricamente el accionar del fujimorismo y sus aliados quienes no solo buscan desvirtuar la voluntad popular expresada en las urnas, la cual dio como ganador a Pedro Castillo, sino que ahora pretenden anular el proceso electoral promoviendo iniciativas golpistas con la complicidad de las Fuerzas Armadas. Continuar la lucha por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana y por un plan de emergencia para encarar la crisis. Las y los invitamos a leer la declaración completa de la Corriente Socialista de las y los Trabajadores.
Sábado 19 de junio de 2021
Rechazamos categóricamente el accionar del fujimorismo y sus aliados quienes no solo buscan desvirtuar la voluntad popular expresada en las urnas, la cual dio como ganador a Pedro Castillo, sino que ahora pretenden anular el proceso electoral promoviendo iniciativas golpistas con la complicidad de las Fuerzas Armadas.
Para esta maniobra se ha prestado últimamente Javier Villa Stein, ex presidente de la Corte Suprema de Justicia, quien ha interpuesto una acción de amparo que busca anular la segunda vuelta. Anteriormente, Jorge Montoya, ex general y electo Congresista por el ultra conservador partido Renovación Popular, también se pronunció públicamente pidiendo la anulación de las elecciones, siendo secundado por una asociación de militares retirados quienes llamaron a los altos mandos del ejército a desconocer el triunfo de Pedro Castillo. A esto se suma ahora la propuesta de la vigente bancada fujimorista de vacar a la actual presidenta del Congreso Mirtha Vázquez para terminar ellos imponiendo un nuevo presidente de este poder del estado, desde donde seguramente buscaran ejercer mayor presión sobre los resultados del balotaje.
Estas acciones que denotan una voluntad antidemocrática, así como la desesperación y la intención de deslegitimar las pasadas elecciones presidenciales por parte de los seguidores de Keiko Fujimori, han venido acompañadas de movilizaciones en la ciudad de Lima, con lo cual buscan presionar a las autoridades electorales y evitar que el Jurado Nacional de Elecciones JNE declare formalmente como ganador a Pedro Castillo antes del 28 de julio. De concretarse esta estrategia, el fujimorismo y sus aliados podrían ungir temporalmente como presidente de la República al próximo presidente del Congreso de mayoría conservadora.
Estos hechos que violentan la voluntad popular y que están orientados a preservar los privilegios de un sector de la casta política corrupta encabezada por Keiko Fujimori, Lourdes Flores Nano, Rafael López Aliaga, entre otros, solo los podremos parar con la movilización y la auto organización obrera y popular, por eso hacemos un llamado a las y los trabajadores, a los campesinos, a la juventud y a los sectores populares de todo el país a constituir en sus centros de trabajo y de vivienda espacios de auto organización para impulsar desde allí la movilización permanente contra el golpismo promovido por el fujimorismo y sus aliados.
De igual manera, hacemos un llamado al pueblo trabajador a no bajar la guardia y darle continuidad a la lucha por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana para acabar con el régimen del 93, el cual nos fue impuesto por Alberto Fujimori y se ha convertido en el principal mecanismo jurídico que favorece la implementación de las políticas neoliberales las cuales generan la sobre explotación de la clase obrera, el saqueo nacional de nuestros recursos naturales, la descapitalización del estado y la sumisión al imperialismo a través del pago de la fraudulenta deuda externa y los Tratados de Libre Comercio. Todo esto ha llevado a que en los últimos 30 años solo se beneficien un grupo reducido de empresarios nacionales y extranjeros y una casta de políticos corruptos, con lo cual se ha condenado a la pobreza y la pobreza a extrema a la gran mayoría del pueblo trabajador.
En ese sentido, recalcamos el llamado al pueblo trabajador y a los votantes de Castillo a rechazar con la movilización los intentos golpistas del fujimorismo y de los sectores reaccionarios y a no renunciar a la lucha por una Asamblea Constituyente, la cual, para que asegure realmente el cambio de rumbo, deberá ser libre y soberana. De igual manera, y así como llamamos a luchar contra las iniciativas golpistas del fujimorismo y porque se respeten los resultados de la segunda vuelta que dieron como ganador a Pedro Castillo, también llamamos a luchar por un plan de emergencia que rompa con los privilegios de los grandes empresarios y los políticos al servicio de la burguesía y nos permita reactivar la economía y superar la profunda crisis socio sanitaria que nos aqueja. Este plan de emergencia debería considerar, entre otras medidas, las siguientes:
1. Expropiación y nacionalización de las clínicas privadas, laboratorios, cadenas de farmacias, fábricas de oxígeno, sin ningún pago o indemnización y bajo control de los trabajadores.
2. Creación de un sistema estatal, único y gratuito de salud pública.
3. Nombramiento y pase a planillas de todos los trabajadores de la salud. No al sistema CAS, terceros, y tercerizados.
4. Implementación y abastecimiento de comedores populares, ollas comunes, en los asentamientos humanos que lo requieran.
5. Bono permanente, mientras dure la pandemia, correspondiente a un salario mínimo, el cual deberá otorgarse a los trabajadores que se quedaron sin trabajo, informales, ambulantes, poblaciones nativas y vulnerables.
6. Pensión vitalicia a todos los mayores de 60 años en situación de abandono y pobreza equivalente a un sueldo mínimo.
7. Castigo efectivo para los corruptos y confiscación de sus propiedades para ponerlos al servicio de la salud y la educación.
8. Restitución de los despedidos a sus puestos de trabajo. Control obrero de las empresas que cierran. Cancelación del Decreto Ley que establece la suspensión perfecta de labores que solo favorece a los capitalistas y deja a miles de trabajadores en la calle.
9. Impuesto progresivo a la riqueza para financiar la materialización de este programa de emergencia. Inmediata cancelación de las exoneraciones tributarias a las empresas capitalistas.
10. Cese inmediato del pago y desconocimiento de la deuda externa e interna del estado y de los acuerdos de libre comercio. Reconocimiento y pago de la llamada deuda social.
11. Nacionalización sin pago de las grandes empresas capitalistas: mineras, industria, pesca, puertos, aeropuertos, transporte, peajes, telecomunicaciones, y que estas empresas sean puestas bajo el control de sus trabajadores.
12. Nacionalización sin pago de los bancos y su fusión en un banco único bajo control de sus trabajadores. Nacionalización del comercio exterior.
Para logar estas y otras medidas, es fundamental que en el proceso de lucha que se viene dando, las masas logren constituir la unidad de sus sindicatos, frentes de defensa, asambleas barriales y populares y poner en pie una Gran Asamblea Obrera y Popular de carácter Nacional donde las y los trabajadores, lo campesinos, los ronderos y el conjunto de los sectores populares estén debidamente representados. Desde este espacio de auto organización pelearemos de mejor manera para derrotar las intentonas golpistas del fujimorismo y para acabar definitivamente con la herencia neoliberal expresada en el régimen de 1993.