Este viernes Piñera ingresó los proyectos de ley conocidos como "Mínimos Comunes" entre el gobierno y la oposición, tras los cual fue duramente criticado por la presidenta del Senado, Yasna Provoste, quien declaró que "llega tarde y llega mal". La Oposición ha declarado que busca ayudar a que Piñera termine su mandato, pero parece que el propio gobierno le pone obstáculos.
Lunes 31 de mayo de 2021
Yasna Provoste, militante DC y presidenta del Senado, criticó duramente los proyectos ingresados por el Ejecutivo. "solo se refiere a dos temas: ayudas sociales y apoyo a las empresas de menor tamaño. No dice nada respecto de lo que habíamos comprometido: mejoramiento en las estrategias sanitarias y una forma mucho más maciza de abordar los temas de financiamiento".
Lo ingresado por Piñera consiste en un bono para todas las familias del Registro Social de Hogares, lo que implica una expansión del Ingreso Familiar de Emergencia de $177.000 por persona y de $467.000 para familias de cuatro miembros, durante tres meses, y un aporte de $ un millón de pesos para las pyme que tengan alguna actividad o algún trabajador contratado y ventas por debajo de 25.000 UF anuales (unos $780 millones), que sin embargo se encuentra por detrás de la propuesta de la Oposición que planteó un bono individual mensual de $229.000 y de $605.000 para una familia de cuatro miembros.
La política de "Mínimos Comunes" de la Oposición surgió como la respuesta concreta ante el fortalecimiento del "Fuera Piñera" en el marco del proceso constituyente, donde además tanto la Derecha como la ex Concertación tuvieron una baja representación en la Convención. Luego de afirmar que buscaban que Piñera terminara su mandato, ubicándose contra una de las más sentidas demandas de la rebelión popular (entienden que si Piñera y su gobierno caen, ellos serán podrían ser los siguientes), por tanto cerraron filas y se apresuraron en instalar los "Mínimos Comunes" como una suerte de salvavidas del manejo político de la crisis sanitaria.
El propio gobierno es su mejor enemigo.
Al parecer uno de los principales obstáculos de la Oposición en mantener hasta el final de su mandato a Piñera en el poder, es el propio gobierno, que presenta una propuesta propia, muy por detrás de lo aconsejado por los partidos de la ex Concertación, dejando algunas temáticas afuera e insistiendo sobre todo en la focalización del gasto social.
Como se puede ver, lejos de hacer causa común con la Oposición, el gobierno se mantiene firme en su línea de beneficiar lo más posible a los empresarios a costa del pueblo trabajador, manteniendo la limitación de toda ayuda, que desde ya es completamente insuficiente para enfrentar la carestía de la vida, y que ya se viene enfrentando recurriendo a los propios ahorros individuales.
Esto sólo remarca lo que hoy es el sentido común de un sector mayoritario de la población, que la defensa de las condiciones de vida y las principales demandas de la rebelión popular de octubre comienzan con la salida de Piñera y todo su gobierno.
Los partidos de la ex Concertación se ubican contra esta posibilidad porque en el fondo de su falsa pose de "amigos del pueblo" se encuentra la defensa de sus intereses, estrechamente ligados con el régimen actual que administraron por 30 años. Sin embargo no son el único obstáculo para la organización de los trabajadores, las mujeres y la juventud.
Pues quienes dirigen las grandes organizaciones de masas, como el Frente Amplio y el Partido Comunista mantienen un silencio cómplice y declinan organizar toda movilización que apunte al Fuera Piñera porque buscan sobre todo integrarse a un régimen que se cae a pedazos, intentando oxigenarlo. Una prueba de ello ha sido su voto favorable a medidas del gobierno, como lo son la ley Antibarricadas o de Protección al Empleo, que han sido un enorme sostén de la estabilidad del régimen pos rebelión y en medio de la crisis sanitaria.
La posibilidad de que estas nuevas propuestas del ejecutivo se implementen está por verse, por ahora es claro que la ex Concertación está aproblemada para salvar al régimen con un gobierno que no les colabora.
