Estudiantes y graduados de las distintas carreras de económicas creamos un observatorio en solidaridad con las necesidades de las mayorías. Poniendo nuestros conocimientos al servicio de visibilizar los grandes problemas sociales y las luchas, cuestionando el individualismo y la búsqueda de maximizar ganancias que quieren imponer desde las autoridades.
Ante la situación del país, desde la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA (FCE), estudiantes y graduados nos organizamos para formar un Observatorio Económico alrededor de las distintas problemáticas de la actualidad. Queremos poner nuestros conocimientos al servicio de visibilizar la realidad que vivimos como estudiantes y la de las grandes mayorías que se ven afectadas por la crisis y la inflación. Poner nuestra solidaridad contra el individualismo y la meritocracia que se imparten muchas veces en las universidades, sobre todo en la nuestra donde gobierna Nuevo Espacio (Franja Morada - UCR).
Desde nuestra facultad nos enseñan todo el tiempo que la economía es la “administración de recursos escasos” y que nuestros conocimientos tienen que estar orientados a maximizar la ganancia (individual) como supuesto beneficio de la sociedad. La idea de escasez está disociada de la enorme cantidad de recursos, el problema es que justamente se concentran y privatizan en muy pocas manos. Como denunció un informe de Oxfam “sólo 10 personas poseen más que el 40% de la población global”. Desigualdades que se pronunciaron durante la pandemia.
En nuestro recorrido en la facultad las autoridades buscan acostumbrarnos a poner nuestros conocimientos al servicio de las empresas, buscando la mejor manera de aumentar sus ganancias. Incluso la gestión radical de Nuevo Espacio les organiza pasantías a los grandes estudios contables como Ernest & Young (EY) o multinacionales como Ford o Techint. ¿Y si este esfuerzo de formarnos lo ponemos en función de entender y mejorar nuestras vidas y la de las mayorías, no las ganancias de unos pocos? Sin trabajar horas extenuantes, que nos impiden estudiar, disfrutar del ocio y encima el sueldo no alcanza a fin de mes. Queremos demostrar que recursos sobran y que es posible trabajar menos y trabajar todos.
Empezamos denunciando las condiciones de trabajo de nuestros docentes en la facultad, en solidaridad con quienes nos brindaron las herramientas y hoy están llevando adelante un reclamo por sus condiciones de trabajo. Mostramos la precarización educativa donde más del 40% del personal docente trabaja gratis, mientras en los auxiliares llega al 80% que trabajan sin sueldo.
También estamos estudiando la situación alrededor del encarecimiento de los alimentos y de la vivienda. Dos grandes necesidades básicas que no se encuentran cubiertas para una gran parte de la población. En un país productor de alimentos, que más de la mitad de lxs niñxs del país tengan problemas de alimentación es irracional. Queremos investigar cuánto ganan las empresas alimenticias, cadenas de supermercados e inmobiliarias, comparando cuánto tiempo debemos trabajar para poder alimentarnos saludablemente o para poder acceder a una vivienda digna.
En este sentido por ejemplo, calculamos que para poder acceder a una vivienda propia a un trabajador con ingresos medios ($53676, según el INDEC) le cuesta 10 años de trabajo. Esto sería sólo si la totalidad de su ingreso lo destinara sólo a pagar la vivienda. Mientras que con las ganancias de sólo un día de Mercado Libre, donde Marcos Galperin es su mayor accionista, se pueden comprar 15 casas diarias. La empresa fue recientemente investigada por evadir impuestos en importaciones por más de 7 millones de dólares.
También creamos el observatorio como un apoyo a fortalecer las luchas de trabajadores y visibilizar sus reclamos. Empezamos analizando la situación de la industria del neumático donde el sindicato (SUTNA) se encuentra peleando por su salario. Un justo reclamo de que las horas del fin de semana se paguen al 200 %. Analizando los balances de las empresas descubrimos irregularidades de las cuales, mientras estas multinacionales pedían ATP al estado para cubrir salarios, ellos multiplicaban por 10 el dinero de sus cuentas bancarias. Además los salarios se mantenían estancos año a año (a pesar de la inflación).
Todas estas ganancias millonarias de las grandes empresas demuestran que reduciendo la jornada laboral a 6 horas, repartiendo el tiempo de trabajo sin afectar el salario, generaría nuevos puestos de trabajo. Esto desde ya, implica cuestionar sus ganancias, que no reinvierten, ni mucho menos, sino que la fugan del país.
En este sentido lo que más dio el impulso fue ver cómo las grandes empresas amasaban fortuna en medio de la pandemia, con ayuda del estado, mientras que a las mayorías recortaban el IFE, y ahora nos quieren hacer pagar la crisis ajustandonos con la excusa de que no hay plata. Muchos de esos empresarios son los que quieren extender la jornada laboral o sacarnos derechos laborales como en Toyota o Arcor.
Queremos mostrar que recursos sobran, pero tienen otro destino, como la enorme sangría de dólares que es el pago de la estafa de la deuda. Tampoco se puede permitir un nuevo aumento de tarifas si ni siquiera las empresas subsidiadas muestran sus balances.
Invitamos a los estudiantes y graduados de las carreras de contador, economía, administración, actuario y sistemas, y todos los que quieran acercarse a colaborar con el observatorio. Queremos poner nuestros conocimientos en favor de las necesidades de las grandes mayorías, para fortalecer la pelea por nuestros derechos, apoyar a las fábricas recuperadas y como un aporte a las bancas del Frente de Izquierda para llevar y fortalecer los reclamos y denuncias de trabajadorxs y el pueblo popular.
Otro futuro es posible. Es necesaria la unidad entre estudiantes y trabajadores ocupados y desocupados para pelear por otra sociedad libre, sin explotados ni explotadores.
Sumate!
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