A raíz de la repentina muerte de Sebastián Piñera durante la jornada del martes, todos los sectores del régimen político, partidos políticos y sus figuras públicas han decidido realizar un blanqueamiento a la figura de Piñera. Desde el Partido Comunista hasta los republicanos.
Miércoles 7 de febrero
En medio del revuelo que ha ocasionado la muerte de Piñera, el conjunto del régimen político, desde los medios de comunicación tradicionales, los partidos políticos tanto del gobierno como de la oposición y sus diversas figuras públicas, han salido a lamentar la muerte de Sebastián Piñera. En las propias palabras de Boric, se le harán todo tipo de homenajes de Estado, contribuyendo a construir el recuerdo de Piñera como un “demócrata” que dejó un gran legado.
Dicho legado, claro que existe, pero está lejos de ser lo que los medios de comunicación buscan instaurar como la “persona más destacada” desde el retorno a la democracia. Su nombre es parte de las 10 familias más multimillonarias del país, incrementando su fortuna posterior a la pandemia.
Recordemos que Sebastián Piñera fue uno de los responsables políticos y materiales de la represión, lesiones, torturas y más de 400 víctimas de trauma ocular durante las movilizaciones del estallido social de octubre del 2019. Además, terminó su Gobierno con una propuesta hacia la privatización del litio, buscando consagrar el saqueo empresarial y con ello la depredación del medio ambiente, algo que Boric ha implementado, al igual que la aprobación del TPP 11, siguiendo así el famoso legado de Piñera.
En este ambiente de instalar unidad nacional, en torno a la figura de Piñera, se está buscando borrar la memoria, históricamente la derecha ha dicho a quienes exigen justicia y fin a la impunidad que son odiosos, resentidos y se cuestiona su “humanidad”. Es fundamental no caer en la “operación blanqueo” que se busca instalar en torno a la figura de Piñera.
Denunciar las violaciones a los DD.HH y la impunidad es una tarea clave y como un pequeño acto de redención con quienes fueron, torturados, mutilados y torturados, durante el período del estallido social. Por las y los nuestros, lo mínimo es la memoria, justicia y fin a la impunidad.