Las y los trabajadores hacen guardia desde el viernes en la puerta de la sucursal central. Afirman que van a "seguir día y noche para que ellos no saquen todo lo que esta acá adentro”. Convocan a movilizar.
Sábado 5 de diciembre de 2020 15:35
A pocas semanas de las fiestas de fin de año, y luego de un año muy difícil en el que la Pandemia agudizó la crisis social y económica, la empresa Jastraw Strong de la familia Rotelli cerró las 11 sucursales que tenía en la ciudad de Río Cuarto, dejando a 32 familias en la calle. Adeudando salarios y aguinaldos, bloque los contactos telefónicos de los y las empeladas, y la única respuesta que han dado son dos patrulleros con policías armados custodiando el acceso a la empresa principal de calle Av. Presidente Perón al 800. Los y las trabajadoras se encuentran reclamando desde el día de ayer cuando al presentarse a trabajar se encontraron con que la patronal cerró las puertas y cambió las cerraduras de todos los locales, impidiéndoles el ingreso para retirar sus pertenencias y sin posibilidad de entablar ningún dialogo.
“Somos 32 empleados. La noche anterior a que ellos cambiasen la cerradura de todas las sucursales habíamos tenido una reunión con todos los compañeros, en la cual ellos no negaron todo, nos dijeron que nos quedemos tranquilos, que si nos fundíamos nos fundíamos todos. Lloraron, juraron por sus hijos que no querían que esto se viniera abajo. Y al día posterior nos encontramos que no podíamos entrar a nuestros trabajos porque cambiaron las cerraduras. No podemos retirar nuestras cosas porque no pudimos ingresar al local”, comentaba una de las trabajadoras para La Izquierda Diario. “Estamos todos reunidos. Hay compañeros que están desde anoche reunidos acá a la espera de una respuesta. Necesitamos por favor que den la cara. Que nos den una explicación. Nosotros necesitamos cobrar, nos adeudan el mes de noviembre, todos estos días que hemos trabajado, el aguinaldo y las vacaciones. Así que estamos a la espera, solo queremos cobrar lo que nos deben. No queremos hacer ningún lio, sino que se presenten y den la cara. Que ellos tanto decían que hablaban con el ejemplo, que nos den la cara y nos digan la verdad porque nosotros tenemos familia, tenemos hijos y es todo un desafío porque no sabemos qué va a pasar con nuestras vidas y queremos lo nuestro, queremos cobrar.”
En la puerta de la empresa se puede ver a más de 15 trabajadores, en su mayoría mujeres, algunas con sus niños, haciendo guardia para evitar que la patronal se lleve lo que queda dentro. Mucha bronca y enojo, pero también preocupación es lo que manifiestan las trabajadoras. Al respecto, una de ellas se sumaba a la entrevista para comentarnos que en la empresa hay personas con más de 30 años de antigüedad “toda una vida, ¿cómo vamos a hacer para conseguir otros trabajos con 50 años de edad? ¿En dónde nos contratan, qué vamos a hacer con nuestras familias? Son unos caraduras. Nos mintieron en la cara. El viernes le presentaron al gremio papeles de que estaban buscando un crédito para podernos pagarnos, y el viernes nos presentan una quiebra. No les importa nada. Somos un numero para ellos. Mientras ellos tienen todo lo que tienen gracias a nosotras, porque le trabajábamos día a día, porque nosotros teníamos un solo franco en la semana en el que nos acomodábamos para hacer nuestras cosas, como ir al médico, y todo para no faltarles, para que no se les enquilombara a ellos y que no cerraran sucursales… y así nos pagaron. Ni siquiera nos atienden los teléfonos, nos bloquearon del WhatsApp.”
Y agregó “Yo espero el colectivo una hora antes para llegar, una compañera viene de Las Higueras, nos cruzamos la ciudad en bici con viento, con lluvia… siempre nos hemos movido de esta forma para cumplir con ellos, ¿y para qué? Para que nos devuelvan con esto…nos jugaron muy turbio… muy sucios son. El gremio nos apoyó y seguimos esperando. La verdad noqueemos generar conflicto pero que nos indemnicen al menos. Necesitamos que nos salden los que nos deben a cada uno de los compañeros.”
Otra de las trabajadoras comentó: “A nosotros nos pagaban en 3 o 4 cuotas, el último mes nos pagaron en 4 cuotas. Nunca esperábamos una respuesta así. Yo tengo 29 años acá adentro, otros compañeros tienen 27, 35 años acá trabajando. No es un día. Necesitamos que den la cara y que nos diga que va a pasar con nosotras. Ellos se portaron muy mal con nosotros… ojalá no terminemos siendo la misma basura que son ellos. Estas personas se han movido siempre así. Todo el tiempo. Sus nombres son Pedro Rafael Rotelli, su hija, quien la apoderada Patricia Rotelli, Adriana Rotelli, Rafael Rotelli y la esposa Mirta Rotelli, ellos son los responsables. Nosotras pensamos seguir acá. Mientras ellos no den la cara pensamos seguir la guardia con los compañeros, nos turnaremos en la noche para que todo lo que esta acá adentro y que es nuestro no se lo lleven. Vamos a seguir día y noche para que ellos no saquen todo lo que esta acá adentro”.
Las y los trabajadores saben que la única forma que tiene de visibilizar su situación es reclamando en las acalles, y que mientras más personas los acompañe, más se fortalecerá su lucha. Por eso convocan para el día de hoy a las 18 horas a una manifestación frente a la central de Panificadora “La Nueva Central” de calle Av. Presidente Perón Oeste 840, para exigir a la patronal a que pague lo que les corresponde.