En un partido bastante "trabado" el calamar y el ciclón empataron este sábado por la décima del torneo. Siguen lejos de los punteros.
Sábado 4 de septiembre de 2021 22:08
Foto Ramiro Gómez | Télam
Aburrido y lejos de las áreas. En líneas generales el partido se grabó en el medio, con momentos de lucidez de los dos equipos. Pero el buen fútbol fue escaso. Con una mano podríamos contar los remates en todo el partido, solo una clara por equipo en el primer tiempo. Cuatro en el segundo, dos adentro por lado.
El gol del ciclón fue de Di Santo. En una jugada medio fortuita, tras una atajada del arquero, le quedó clarísima. Y casi le erra.
El empate del local fue un remate de Mansilla, que tomó por sorpresa a Torrico, que no tuvo mucha respuesta.
No hay mucho más que hablar de un partido que se trabó, se metió en el medio. Platense tuvo una, que Vigliano, le saco una clara donde el delantero arrancaba solo y cobró una mano anterior, aplicando como no corresponde la ley de ventaja. Típico de un árbitro que no está nunca a la altura de nada.
Hacia el final, para completar la mediocridad del equipo de Boedo, Uvita se hizo expulsar insultando al árbitro. Irresponsable, sobre todo porque era el que estaba mejor en la general en los partidos anteriores.
Una lástima después del repunte que se había visto el partido anterior. Poco de esto opinaron los protagonistas. Fue más relevante seguir con el tema hermanos Romero (que, dicho sea de paso, los periodistas ventilaron que el plantel cortó el banner de los hermanos y a modo ritual tiraron a la basura. Un despropósito periodístico que evidentemente no influye en el juego)
A los días de júbilo de San Lorenzo, con problemas tapados por una victoria, lo taparon las nubes del juego de este sábado. Poco y nada del ciclón, que tiene que dejar los quilombos Romero atrás y enfocarse en jugar. Adentro la dirigencia está quebrada, pero ese es tema para nota aparte del presente institucional que lejos de mejorar se quiebra cada vez más.