El gobierno de Gabriel Boric no ha sido capaz de de retirar las querellas que generaron la prisión política.
Martes 18 de octubre de 2022
El caso de Matías Rojas y Alejandro Carvajal son perseguidos por dos casos distintos que engloban las manifestaciones de la revuelta de octubre del 2019.
Alejandro Carvajal, perseguido por el incendio del edificio de la Universidad Pedro de Valdivia del 8 de noviembre 2019, el mismo día en que Gustavo Gatica perdió a sus ojos. Condenado en primera instancia a libertad vigilada, se vio anulada su instancia por una demanda del Ministerio del Interior y de la misma Universidad Pedro de Valdivia. Tiene ahora que cumplir la sentencia de 5 años y un dia.
Matías Rojas, perseguido por el incendio del Hotel Principado y la fabricación de bombas molotov, eventos ocurridos durante las manifestaciones relacionadas al Estallido Social, en noviembre de 2019. Fue condenado y luego absuelto. A petición del Consejo de Defensa del Estado su absolución fue revocada y se pide ahora la ejecución de una parte de la condena, aunque esa petición fue mal planteada y, en sí no tiene validez legal.
El pasado miércoles 5 de octubre, el Centro de Justicia de Santiago de Chile nuevamente declaró la prisión a estos dos jóvenes. Se trata de hacer caer la absolución que había sido emitida por el caso de Matías Rojas y querellar nuevamente a este joven, después de haber pasado ya 3 años en la cárcel por un crimen que no había cometido. Una petición mal planteada que hace que la vuelta de Matías a la cárcel sea un hecho muy grave. Además, el juez, Leonardo Valdivieso Lobos, ni siquiera tenía en su posesión todos los documentos relacionados con la petición del Consejo de Defensa.