La mañanera de este miércoles, la primera de Sheinbaum como presidente de México, fue dedicada al ofrecimiento de disculpas por la matanza del 2 de octubre.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Miércoles 2 de octubre
Miércoles 2 de octubre, igual que en 1968. Un día histórico para México, para bien o para mal. Además de cumplirse un nuevo aniversario de la matanza en la Plaza de las Tres Culturas por parte del ejército y la Dirección Federal de Seguridad, es nada menos que el primer día de la presidencia de Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ocupar el poder ejecutivo en la historia del país.
El día de ayer, al dar su discurso en la toma de posesión, Sheinbaum declaró que "les manifiesto que en nuestro gobierno garatizaremos todas las libertades, ya que es un principio democrático. Nunca usaremos la fuerza del estado para reprimir al pueblo". La mañana de este miércoles la dedicó en su conferencia de prensa a dar el ofrecimiento de disculpa por parte del gobierno a los hechos ocurridos hace 56 años.
Como Gobierno de la transformación reprobamos la violación de derechos y los crímenes perpetrados hace 56 años, y por ese motivo se ofrece una sentida disculpa pública a todas las personas que perdieron a un ser querido o fueron víctimas del crimen de lesa humanidad cometido la noche del 2 de octubre. Estos no pueden volver a repetirse
Agregó: "soy hija del 68, mi madre participó en el movimiento del 68, participó como profesora ayudando a los estudiantes, luego fue expulsada del IPN por apoyarlos". Esto en referencia a su madre, Annie Pardo, quien en el 68 era parte de la Coalición de Maestros.
Si bien la disculpa es una pequeña conquista arrancada con décadas de lucha, no es suficiente mientras existan cuerpos represivos que enfrenten las manifestaciones populares. No olvidamos, no perdonamos y nos nos reconciliamos, y por eso nos posicionamos contra la militarización del país, hoy protagonizada por la Guardia Nacional y el Ejército bajo las órdenes de la SEDENA, una institución que tiene las manos manchadas de sangre desde la Guerra Sucia, pasando por masacres como la de Tlatelolco y la desaparición forzada de los normalistas de Ayotzinapa.
Aunado a ello, ante la pregunta de cómo procederá su gobierno frente a la demanda de juicio a los expresidentes, Sheinbaum respondió que "nosotros no vamos a entrar en eso. Además ni nos corresponde, le correspondería en todo caso a la Fiscalía o al Poder Judicial. No le corresponde al Ejecutivo" y que "en el caso de los expresidentes, nosotros no vamos en el gobierno a... Señalaremos en lo que no estemos de acuerdo. [...] De nuestra parte no va a haber ninguna denuncia. Que la historia juzga a las personas y muchos de ellos están juzgados por el pueblo de México".
Frente a las expectativas que despierta la idea de la primera mujer presidente, autoproclamada de izquierda, así como la continuidad que enfrenta para mantener la presunte "transformación" iniciada por López Obrador, falta ver cómo actúa ante la marcha que partirá dentro de unas horas desde la Plaza de las Tres Culturas.
