Universidad. Psicología (UBA): Exitoso debate sobre violencia de género

Una vez presentadas las panelistas, María Pía López, docente e investigadora de la UBA, asidua panelista de 678 y ex-Carta Abierta, abrió la charla problematizando las contradicciones entre los avances en la visibilidad de la opresión hacia las mujeres. Marcando como las estadísticas recopiladas por organizaciones de mujeres muestran que, a pesar de estar más difundidos los casos de femicidios y violencia, los mismos se encuentran en constante aumento.

A lo largo del panel se debatió alrededor de la violencia, los femicidios y el aborto. Débora Tajer, profesora adjunta a cargo de la cátedra Introducción a los Estudios de Género, recalcó como la violencia hacia las mujeres y los femicidios son un tipo de disciplinamiento. También abordó la cuestión de la salud, realizando un contrapunto respecto a las diferencias en la realidad que viven las mujeres y los hombres. En relación a la propia facultad denunció la precarización de los docentes de la cátedra, tanto a nivel salarial como en cuanto a los nombramientos de cargos que lleva adelante la gestión, y mencionó la conformación de un espacio intercátedras de género compuesto por docentes que desde sus materias abordan estas discusiones.

Por su parte, la profesora titular de Psicología Preventiva, Graciela Zaldúa, afirmó que se debía pensar la psicología desde una perspectiva crítica. Recalcó la importancia del cuestionamiento del paradigma desde el cual se la aborda actualmente, haciendo eje en una psicología comunitaria en contraposición a la visión de la clínica individual. A través de este cuestionamiento, sostuvo, se abren oportunidades para construir una nueva alternativa. A su vez, hizo hincapié en la necesidad de tener en cuenta las diferentes cuestiones sociales como la clase, el género y la raza, entre otros.

Andrea D’atri, dirigente del PTS en el Frente de Izquierda, fundadora de Pan y Rosas y licenciada en psicología, retomó la cuestión del disciplinamiento del género femenino, para demostrar que los casos particulares de violencia machista, son parte de una gran estructura donde el Estado es el principal sostenedor de la violencia hacia las mujeres. Donde también la Iglesia juega un rol central en reproducir un discurso misógino, el modelo de familia y el rol de la mujer al servicio de la reproducción. Así ejemplificó como en Argentina, donde el aborto clandestino ocasiona más de 300 muertes de mujeres por año, la responsabilidad cae directamente en el Estado y los partidos con mayoría parlamentaria que se niegan a legalizarlo. Ante lo cual afirmó que es necesaria una fuerza material, en las calles, movilizándose por las demandas de las mujeres y los oprimidos, que en ese camino denuncie el rol del Estado y luche por la plena emancipación de la mujer y todas las personas explotadas y oprimidas.

El evento, que tuvo como uno de sus objetivos abrir el debate por la perspectiva de género en la carrera y plantear la lucha para poner la universidad al servicio de quienes sufren día a día la explotación y la opresión, cerró con la convocatoria por parte de Pan y Rosas para marchar el 3 de Junio. Convocando a marchar por #NiUnaMenos contra la violencia y los femicidios, y a su vez denunciando al Estado como responsable y parte de esa gran estructura que reproduce y sostiene la violencia hacia las mujeres y a los partidos como el kirchnerismo y el macrismo que son los mismos que niegan un derecho elemental como el aborto libre, legal, seguro y gratuito.