Meyerhold fue un director teatral, actor y teórico ruso, mentor de la Convención Consciente y la Biomecánica. Se opuso al realismo socialista por lo que fue perseguido por Stalin.
Miércoles 22 de octubre de 2014
Vsevolod Emílievich Meyerhold (1874 - 1940) Director y teórico teatral, uno de los representantes más destacados del teatro contemporáneo junto a Stanislavski, del que se separa buscando un camino propio que lo lleva a desarrollar la teoría teatral de la Convención Consciente y el método interpretativo conocido como Biomecánica.
En 1902 abandona el Teatro de Arte de Moscú para llevar a cabo proyectos teatrales como director y actor. Estos le sirvieron para experimentar y crear nuevos métodos de puesta en escena. Tras el estallido de la Revolución rusa de 1905, parte a San Petersburgo, y es convocado por Stanislavski para dirigir el Primer Teatro Estudio del Teatro de Arte, laboratorio de carácter experimental.
Si bien Meyerhold nunca formuló su método biomecánico, ha quedado documentado en distintos escritos propios, cartas, críticas, investigaciones, notas de actores de compañía, etc. Podría definirse a la biomecánica como un método de entrenamiento y creación basado en el estudio de la mecánica aplicada al cuerpo del actor, mediante la racionalización de cada uno de sus movimientos. Este es el principio y el fin biomecánico: introducir el cuerpo en la estructura de la obra, no solo el cuerpo físico, sino el biocuerpo (cuerpo-alma) y tener una capacidad de control. Los actores deben estudiar las leyes del movimiento en el hombre y los animales, lo que les permitirá adquirir, a través de la práctica, reflejos vivos. Coordinar y calcular, ponerse a prueba con sus movimientos.
Por otra parte, el teatro de la convención consciente estaba en contra de la cuarta pared, dejaba encendidas las luces de la sala, suprimía el telón y permitía que los espectadores viesen las paredes de ladrillo del fondo del teatro para que el espectador no olvidase que estaba asistiendo a una representación. Se opone al procedimiento de la ilusión de verdad propio del Naturalismo que se caracteriza por la reproducción en la escena de los ambientes y problemas de la vida cotidiana, con el objetivo de hacer de los personajes una repetición de tipos reales.
Tras la Revolución de Octubre de 1917, se une a los poetas Blok y a Maiakowski respondiendo al llamamiento lanzado por el Primer Ministro Lunacharski sobre la nueva cultura. Meyerhold se adhire al Partido Comunista y es nombrado director de la sección teatral de la Comisaría de Instrucción Pública.
Los teatros pasaron a formar parte de un nuevo organismo gubernamental conocido como T.E.O. y a Meyerhold se le encomendó dirigir el de Petrogrado, antigua San Petersburgo, en el que estrenó Misterio Bufo, de Maiakovski, para celebrar el primer aniversario de la Revolución Rusa (1918). Poco tiempo después las autoridades movilizaron a todos los trabajadores del teatro para luchar en los frentes, tras el estallido de la guerra civil. En el mes de junio de 1919, acosado por el hambre, partió hacia Yalta. En este viaje fue apresado por el bando de los mencheviques que lo condenaron a muerte, aunque pudo salvarse poco tiempo antes de la victoria bolchevique.
En 1923, después de intensos estudios sobre la Biomecánica y tras mantener estrechos contactos con el recién aparecido Constructivismo, fue cuando la figura de Meyerhold cobró mayor relieve institucional. Con la edición de un libro homenaje a su labor, titulado Vsevolod Meyerhold, se inició una nueva etapa que quedó remarcada en el XI Congreso del Partido Comunista Ruso, que ponderó la realización de una literatura comunista que se opusiera, por sus tendencias, temas y forma, a la acción disgregadora de la literatura burguesa.
Meyerhold fue un defensor ardiente del simbolismo en teatro. Reivindicó el papel del actor como trabajador. En el marco de una revolución donde los obreros son quienes toman el poder, la definición, formas, técnicas y organización del trabajo como actividad humana adquiere una importancia central, y quedan expuestas propuestas que no sólo buscan llevar sus obras a los lugares de trabajo, sino que consideran a la actividad artística también en términos de “un trabajo”.
También se enfrentó a los principios del academicismo teatral, consideraba que eran incapaces de adaptarse a la nueva realidad. En sus obras utilizó escenarios desnudos, objetos en lugar de decorados y la disposición intencional de movimientos.
Meyerhold inspiró a artistas y directores de cine como Serguéi Eisenstein, que empleó en sus películas actores que trabajaban según la tradición del director teatral.
Posteriormente se opuso al realismo socialista. “Si es solo razón, el teatro es una conferencia en donde se exponen ideas. Nosotros no aceptamos esto, la propaganda racional es nociva, el teatro puede lanzar ideas al espectador pero debe ocuparse también del otro aspecto: la sensibilidad”.
En 1930, cuando Iósif Stalin atacó todo arte de vanguardia y experimentación, sus trabajos fueron considerados alienantes para el pueblo soviético. En 1938 se cerró su teatro y un año después Meyerhold fue encarcelado. Siguiendo el método de las purgas estalinistas, se lo obligó por la fuerza a confesar y arrepentirse de su desviación (crimen) política. El 2 de febrero de 1940 fue fusilado. En 1953, tras la muerte de Stalin, su nombre fue reivindicado y exonerado de todos los cargos.