Las apps de reparto lograron que los restaurantes crecieran un 33 % anual, mientras los trabajadores de reparto se encuentran en condiciones de precariedad.
Jueves 27 de mayo de 2021
Desde la entrada de las aplicaciones de reparto como Rappi, DiDi, Uber provoco un efecto positivo para los grandes restaurantes y los dueños de las cadenas de comida, ya que provoco un aumento en sus ganancias de entre el 28 % y el 33 % anual en sus ganancias del 2013 al 2018.
Ganancias que no se ven reflejadas en los salarios de los trabajadores restauranteros ni para los trabajadores de las app de reparto, mientras esto sucede el estudio realizado por el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), en colaboración con la Asociación de Internet.MX dice que las apps de reparto permitió la creación de nuevos empleos y un crecimiento para los comercios, pero lo que no dice es la condición de precariedad en la que se encuentran y que varios comercios locales que están en las apps es reflejo del trabajo informal que va en aumento.
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Además este estudio continua diciendo que las app de reparto permitió ser una válvula de escape para los restauranteros en el marco de la pandemia, pero incluso a pesar de que semana con semana hay un aumento de 250% de repartidores de estas empresas, no quiere decir que mas personas se sumen al mundo laboral con condiciones dignas, sino mas bien que cada día miles se quedan sin empleo, y tiene que seguir manteniendo a sus familias a costa de su salud y de míseros salarios.
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Cómo consecuencia de la precarización laboral, los repartidores en varias partes del mundo se han venido organizando, tan solo el año pasado los repartidores de Brasil, México, Argentina, Chile, Costa Rica, Venezuela, Guatemala y Ecuador, decidimos impulsar un paro internacional de trabajadores de plataformas de reparto.
Incluso el pasado 1° de mayo se movilizaron realizaron una rodada donde denunciaron sus condiciones laborales y que no deberían de ser considerados como socios sino como capítulo especial de la Ley Federal del Trabajo, además dijeron que ya son 75 los repartidores fallecidos en accidentes.
La crisis económica como consecuencia de la pandemia, ha empujado a miles de jóvenes a desertar de la escuela, ser parte de los millones de nuevos desempleados o haber percibido un recorte salarial, lo que los obligó a buscar una nueva fuente de trabajo. Así, miles de nuevos jóvenes han engrosado las filas del trabajo precario ya sea como repartidores, trabajando en las cadenas de comida rápida o en los call center.
Los trabajadores de reparto pueden ganar unos 7 mil pesos al mes si se conectan todo el día, realizando 20 o 25 viajes diarios, por 6 días de la semana. Esto sin ningún tipo de seguridad social, prestaciones o relación laboral con las multinacionales. En algunos casos se ganan de 200 a 250 pesos laborando un promedio de siete horas ganando mucho menos de 6 mil mensuales.
Bajo la pandemia, los repartidores ya no solo enfrentan los riesgos que imponen las condiciones precarias de trabajo como los accidentes viales, sino a la exposición al contagio, ya que pese a las distintas oleadas de pandemia, se mantuvieron trabajando sin opciones de quedarse en casa.
Ante estas condiciones laborales es necesario la organización independiente a los partidos patronales y el gobierno, la lucha en la calle y la unidad entre los trabajadores sindicalizados y no sindicalizados, solo así conquistaremos mejores condiciones laborales.
