Este martes en horas de la mañana fue realizada en la Parroquia universitaria una rueda de prensa con el trabajador ferrominero Rodney Álvarez, 11 años preso injustamente. También hablaron Carolina y Cástulo González padres del joven controlador aéreo Guillermo González de 25 años, quien fue detenido el 20 de mayo de 2020.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Miércoles 1ro de junio de 2022
La rueda de prensa se realizó este martes, 31 de mayo, en la parroquia universitaria de la Universidad Central de Venezuela (UCV), en Caracas con el trabajador ferrominero Rodney Álvarez, 11 años preso injustamente, fue detenido el 17 de junio del año 2011 siendo inocente, siendo inculpado por un crimen que no cometió, actualmente se encuentra con libertad plena, y le exige al estado venezolano reparación, reenganche e indemnización por todos estos años en los que los derechos tanto de él como de su familia fueron violentados.
También hablaron Carolina y Cástulo González padres del joven controlador aéreo Guillermo González de 25 años, quien fue detenido el 20 de mayo de 2020 y actualmente se encuentra en la cárcel del Rodeo siendo inocente, por reportar ante sus superiores una salida irregular de aviones del aeropuerto de Maiquetía, se le acusa de asociación para delinquir, terrorismo, entre otras, no existen pruebas legítimas que confirmen lo que se le acusa, la familia exige justicia y libertad plena para su hijo.
#Ahora Rodney Álvarez, obrero recientemente liberado luego de casi 11 años preso injustamente, y los padres de Guillermo González, controlador aéreo preso hace más de un año por denunciar corrupción, exponen sus argumentos en rueda de prensa. #LiberenALxsTrabajadorxsPresxs pic.twitter.com/V99SAVR1Nh
— La Izquierda Diario Venezuela (@LaIzqDiario_VE) May 31, 2022
“Estuve privado de libertad durante 11 años injustamente por un delito que yo no había cometido, fui tomado como chivo expiatorio sin ningún tipos de pruebas, fui encarcelado”, declaró Rodney Álvarez. “Funcionarios del Cicpc me decía que me declarara culpable porque desde mi detención ya había sido condenado”.
“Yo viví la experiencia de estar privado de libertad injustamente, por un supuesto delito que nunca cometí, donde el retardo procesal es atroz y donde además nunca se respeta del debido proceso judicial”, afirmó. Manifestó también que “el responsable del retardo procesal y las torturas recibidas por mi persona durante mi injusto juicio es el Estado Nacional y el Ministerio Público”.
“Las cárceles de Venezuela están hechas para despojos humanos. No hay agua potable, servicio médico, no contamos con buena alimentación. Yo le pido al Estado, al gobierno de turno, la liberación inmediata de todos los compañeros trabajadores presos que están en las distintas cárceles de Venezuela”, dijo.
“Mi experiencia es compleja y no es fácil de relatar. Sufrí tortura, maltrato, represión, violencia desatada de todo tipo en prisión. En dos oportunidades fui apuñalado y solo por cuidar de un espacio para intentar dormir. Lo que se respira y vive en las prisiones venezolanas es inhumano, todo es violencia, maltrato y corrupción”, manifestó.
El trabajador ferrominero indicó que durante los casi 11 años de prisión, se perdió de momentos importantes con sus hijos y familiares: “Mis derechos me fueron vulnerados, me quitaron el derecho de ser padre, de ser hijo, de ser hermano, de poder compartir con mis hijos, de poder llevarlos a la escuela, de poder disfrutar con ellos, ir al parque, comerme un helado”.
Álvarez manifestó su rechazo al retardo procesal que existe en los tribunales venezolanos y que perjudica a quienes son inocentes y se encuentran presos.
También demandó su reincorporación laboral y el pago de salarios. “Pido es volver a mi puesto de trabajo, eso es lo que pido, y que se me paguen mis salarios caídos, los cuales dejé de percibir y los beneficios que dejaron de gozar mis hijos”, exigió.
Rodney pidió por la libertad de otros compañeros que está detenidos por denunciar hechos de corrupción y aunque no hay cifras de cuántos son estima que son muchos los trabajadores tras las rejas.
“Hay demasiados compañeros presos que no podría decir las cifras. Están privados injustamente por denunciar corrupción, son demasiado los que hay que todavía no hay una cifra exacta de todos los compañeros que están presos ilegítimamente”, dijo el trabajador ferrominero.
Por su parte la madre de Guillermo González, el jóven controlador aéreo declaró que “A Guillermo en febrero de 2020 le ofrecieron que dejara entrar y salir ciertos aviones y no los reportara, y que por cada avión que él no reportara le iban a pagar 40.000 dólares”.
Señaló que su hijo reveló la irregularidad a sus superiores. Tres meses después lo llevaron a la sede del Dgcim para una supuesta entrevista y desde entonces se encuentra detenido. Precisó que el juicio de su hijo se desarrolla de forma lenta.
Asimismo, contó que dos años después de la detención, el Fiscal General designado por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) ofreció una rueda de prensa para hablar del caso de su hijo. "Dijo que estaba revelando información estratégica, pero se le olvidó decir la denuncia original de Guillermo", resaltó.
Para Carolina de González, lo que más le pesa es ver cómo su hijo y su familia cayeron en un sistema al que catalogó de “injusticia”, “ya le ha quitado a mi hijo dos años de su vida siendo inocente”.