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Red Internacional
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18 de octubre. Se retoman las calles con fuerza ante la ausencia del Frente Amplio y la moderación del PC

Cientos de miles de personas llegaron hoy a plaza dignidad a un año del inicio de la rebelión popular, al igual que algunas regiones, donde el panorama fue de masivas movilizaciones. Mientras la “oposición” y el Frente Amplio decidieron abstenerse de llamar a movilizar, la realidad les pego un portazo.

Lunes 19 de octubre de 2020

Cerca del medio día comenzaron a congregarse los primeros manifestantes en plaza dignidad, con canticos alusivos a la represión, contra Piñera, la policía y los militares se escuchaban cada vez más. Así como lienzos y carteles que denunciaban la mantención de presos políticos de la rebelión, la violación de derechos humanos, por no más afp, el derecho a la vivienda y por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana.

Finalmente fueron cientos de miles los que llegaron durante todo el día a plaza dignidad y en los lugares más simbólicos de distintas regiones del país, así como manifestaciones de chilenos en el extranjero. La represión no se hizo esperar y hasta este momento se cuenta con manifestantes heridos y una serie de detenidos a nivel nacional.

La cara de la “oposición”

Mientras la oposición llamaba a manifestaciones pacíficas y el cuidado para el plebiscito cocinado el 15 de noviembre en el acuerdo por la paz, como el pacto Unidad Constituyente donde participan la Democracia Cristiana, el Partido Socialista, el PPD, el Partido Radical, Ciudadano y progresistas, manifestando que la mejor forma de conmemora el 18-O es ir a votar el 25 de octubre por una Convención Constitucional.

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Hace menos de una semana el diputado del frente amplio, por Convergencia Social, Gabriel Boric, realizó un llamado a no manifestarse en Plaza Dignidad, y condenando la violencia en las calles, al mismo tono del gobierno de Piñera. Durante el día Jadue a través de su cuenta de twitter llamó a manifestarse con alegría, sabiduría y unidad y cuidarse para votar convención constitucional, enmarcados totalmente en la vía institucional y el pacto, dejando atrás todas las luchas de la rebelión popular.

Pese a que el gobierno de Piñera intentó militarizar y llenar de policías la Plaza Dignidad junto con el apoyo cómplice de la pseuda oposición, quedó demostrado que la lucha se sigue planteando con movilización.

El pacto por la paz y la trampas del plebiscito

A menos de 1 semana del plebiscito, la franja televisiva ha demostrado nuevamente que el discurso del frente amplio, el partido comunista y la ex concertación quienes son partes del comando del Apruebo Chile Digno, dejaron atrás las principales demandas de la rebelión popular, bajo el pacto de Noviembre que terminó con un plebiscito y una férrea campaña a la Convención Constitucional, como si esta fuese a ser realmente cien por ciento ciudadana, pero lo que estos no dejan en evidencia es que este plebiscito tiene una serie de trampas, como los 2/3 y el sistema electoral, ¿y es que les parece normal que hasta Lavín (UDI) diga a viva voz que votará Convención Constituyente?.

Dentro del plebiscito nada se dice de las trampas, del proceso controlado y ajustado a los mismos partidos políticos tradicionales de siempre y a quienes fueron parte del “Acuerdo por la paz” y es que el sistema electoral chileno (D’ Hondt), si bien abrió paso a un sistema más proporcional, no termina por resolver los problemas de representatividad.

Las elecciones de los Constituyentes deben realizarse bajo el sistema electoral chileno (método D’Hondt), es decir bajo un sistema de listas produce un arrastre de los candidatos del mismo pacto, es decir quienes obtienen mayor cantidad de votos pueden quedar fuera, si es que otros con menos votos son arrastrados por miembros de su propia lista, es decir, bajo este sistema se elegirán a quienes serán los Convencionales Constituyentes, en el que la mayoría serán pertenecientes a los mismos partidos políticos que firmaron el “Acuerdo por la paz” y quienes han mantenido la herencia pinochetista.

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Así también se suma la ley 21.2000, que puso límites a la “hoja en blanco”, como a tratados internacionales ratificados por Chile, los cuales regulan las inversiones extranjeras en temas como AFP, educación o salud. O los famosos 2/3, en el que la derecha ha hecho todos los esfuerzos para cualquier intento de cambiar la Constitución, tal y como se menciona en el art. 133 de la reforma constitucional que da comienzo al proceso se menciona que: “La Convención deberá aprobar las normas y el reglamento de votación de las mismas por un quórum de dos tercios de sus miembros en ejercicio”.

Es decir, que ya de principio a iniciarse el proceso constituyente, será limitado por los 2/3 donde una minoría decide por sobre una mayoría, estos 2/3 hacen que no signifique una hoja en blanco, sino que insta de forma directa a tener que realizar amplios acuerdos. ¿Y si no se producen?, de ser así, el sistema electoral insta a que la coalición de derecha puede tener una representación mayor en la Convención Constitucional a través del sistema de arrastre, vetando de igual forma las discusiones que pudiesen realizarse.

Mientras la llamada “oposición” condena todo tipo de violencia, e incluso, el frente amplio votó leyes antiprotesta, que ahora tienen a miles de presos políticos de la rebelión, queda demostrado hoy, que la fuerza de las calles no se ha abandonado y que la fuerza por lucha por una verdadera Asamblea Constituyente Libre y Soberana es posible, en el que debemos retomar el camino de octubre, ir por fuera Piñera, por la libertad de los presos políticos de la rebelión y por juicio y castigo a todos los violadores de derechos humanos.

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