Aurelio Tomás es columnista de política y temas gremiales en diario Perfil. Segunda parte de la serie: los alineamientos políticos de la CGT y la situación del sindicalismo combativo y la izquierda.
Jueves 28 de julio de 2016
¿En qué están los alineamientos políticos de las distintas alas de la CGT hoy?
Es un momento especial, en que acaba de asumir un Gobierno no peronista, y el peronismo no tiene un liderazgo claro. Más allá de cómo van a moverse ellos en términos políticos, siendo que tienen una capacidad camaleónica muy grande, lo más interesante de la relación sindicatos-política es eso: es el momento donde con más autonomía se pueden mover.
Es el mayor momento de autonomía política de los sindicatos
Lo que sí me parece muy interesante son los puentes que están tendiendo los intendentes del conurbano del justicialismo, con varios sectores sindicales. Como un modo de decir ¿hacia dónde avanzamos? No es un liderazgo fuerte como podría ser que se junte un gobernador, o el presidente del PJ con los sindicatos, sino que son la base misma del poder político del PJ, los intendentes, los que se están acercando. Eso me parece interesante de lo que está pasando. Pero va a ser muy fluído, ninguno está casado con nadie políticamente, ni el Momo Venegas con el PRO ni Héctor Daer o el propio Barrionuevo con el Frente Renovador, creo que están imponiendo un poco su juego, no tanto el seguidismo a la política.
Después, hay sindicatos históricamente con más aspiraciones de participar en política. Por ejemplo a la Uocra no tiene la menor necesidad de meter diputados, mientras que en la UOM siempre hubo mucha intención. Hay que seguir el caso de algunos sectores que pueden querer llegar a la dirección de los gremios, el caso de Romero en el Smata y Furlán en la UOM, tratando de buscar en la política un lugar de exposición para ganar un lugar de liderazgo en sus gremios.
¿Cómo se ve la situación de los sectores "combativos" y de izquierda en los gremios? ¿Qué opinión tenés al respecto?
Todos ven como un signo de debilidad entre sus pares, cuando se juntan entre ellos, cuando dentro de un gremio hay mucho crecimiento de la izquierda, es que algo mal su secretario general está haciendo. Esa es la percepción entre colegas. Eso es algo que los sectores que muchos gremios que habían estado más opuestos al kirchnerismo, de la CGT Azopardo, le achacaban a sus pares de la CGT “Balcarce” o “Caló”, como la quieran llamar. Que al haber sido serviles al kirchnerismo, le terminaban dando espacio a ese crecimiento. Por otro lado es verdad que hay tendencias a reconocer que algún tipo de democratización interna tiene que haber. Por lo menos renovación generacional. Creo que una herramienta que están queriendo utilizar, como una forma de regeneración propia, evitando que sean la izquierda y los sectores combativos, es generar más liderazgos jóvenes. Pero para ellos son dos lógicas opuestas de concebir el poder. Y cuantos más sectores combativos hay en un gremio, más fuerte se considera el fracaso de su dirección. No creo que haya ninguna solución amistosa posible, porque cuando las lógicas son tan distintas, el crecimiento de uno significa la pérdida de otro. Va a ser interesante cómo se va a seguir desarrollando, y cuánto aprovechamiento pueden hacer esos sectores en un contexto de crisis.
Cuanto más sectores combativos hay en un gremio, más fuerte se considera el fracaso de su dirección
Creo que aunque va un poco contra la lógica, los contextos que han sido más favorables a la izquierda son los de crecimiento, no los de retracción tan fuerte. Creo que el PTS pudo crecer en la Zona Norte en un contexto que había habido un crecimiento previo.
Distinto sería un escenario que se acerque más a disparada inflacionaria, y no de estanflación como se está dando hasta ahora. Ahí es barajar y dar de nuevo.
Cuando tenés conmociones tan grandes en el sistema político, como las que conoció Argentina en el 2001 lo que pasa después es un agujero negro, donde los sectores más combativos son lo que saben moverse en ese tipo de terrenos. Pero es difícil hacer predicciones.
¿Cómo te parece que está la conflictividad y el "estado de ánimo" hoy en los gremios y lugares de trabajo? ¿qué escenarios posibles ves para los próximos meses?
Salvo que haya un quiebre. Mientras la situación sea la recesión pero no este abismo del que habla Macri, creo que va a haber focos de conflictividad pero no la que vimos en la última fase del crecimiento kirchnerista. Pero si se repiten escenarios con hiperinflación, o como el 2001, no sé lo que pasaría. Hay sectores que están haciendo más atacados, entonces puede haber conflictos parciales o industrias más afectadas. Si tenés una crisis terrible en Tierra del Fuego no sé qué puede llegar a pasar. O cuando se dan esos fenómenos en que tenés una fábrica al lado de otra y la conciencia de clase más visible. Pero es difícil hacer predicciones, porque hay también muchos lugares donde pesa esa idea de que “toca crisis” y “repartir costos”.