Solidaridad de clase. Trabajadores de callcenter y apps de la zona oeste del GBA se solidarizaron con los tercerizados de Edesur

Los trabajadores de EMA y de Argencobra fueron despedidos luego de exigir el reencuadramiento laboral. Esta semana acamparon frente al ministerio de trabajo exigiendo a Moroni y al Gobierno que los escuchen y le devuelvan sus puestos de trabajo.

Durante la semana, distintos sectores se acercaron a apoyar su lucha como los trabajadores de MCM, GPS, Latam, la Clínica San Andrés, de Trenes Argentinos, del Subte, entre otros, así como referentes políticos como Nicolas Del Caño y Myriam Bregman. Asimismo, los trabajadores vienen rodeandose de solidaridad, impulsando el fondo de lucha para poder sostener su pelea y que no se quiebre por el hambre.

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En ese contexto jóvenes de la Red de Trabajadorxs Precarizadxs de la Zona Oeste del GBA se acercaron a acompañar el acampe y dar un humilde aporte al fondo de lucha, que recolectaron entre trabajadores de aplicaciones de delivery del oeste y de callcenter.

Uno de los jóvenes de callcenter nos contaba: “Identificamos su lucha como nuestra. La empresa para la que trabajamos, con sueldos que no alcanzan para nada y menos en esta situación, ritmos que afectan nuestra salud, trabajando con covid, solo para que los empresarios aumenten sus ganancias, también terceriza trabajo para Edesur. Atendemos a sus usuarios, trabajadores que están sufriendo los tarifazos y la falta de luz, pero para Edesur somos trabajadores de segunda.”

En Argentina cerca del 35 por ciento de los trabajadores activos son trabajadores en negro, eventuales o con salarios por debajo (muy por debajo) del valor de la canasta alimenticia. Una muestra de esto fue cuando el año pasado cerca de 11 millones de personas se inscribieron para solicitar el IFE, que luego el gobierno segmento en 3 pagos de 10 mil pesos cada dos meses.

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A los jóvenes nos quedan dos opciones: o la desocupación o trabajamos ultra precarios mientras el gobierno, cómo venimos contando, mira para otro lado.

La expresión más brutal de la precarización son los crímenes laborales como el caso de Octavio Migueles, un jóven trabajador de La Matanza, a quien lo mandaron a pintar dentro de un tanque sin protección y murió intoxicado. Con la lucha de sus familiares y amigos, La Red Oeste también se viene solidarizando en apoyo a la pelea por Justicia por Octavio, que está comenzando a ganar apoyo de referentes como Nicolás Del Caño.

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Una trabajadora del call center recordaba el caso de Matias Dimuro para mostrar que no son casos aislados y también es parte de sus banderas: “Parte de nosotros trabajamos para empresas de telecomunicaciones precarizadoras y tercerizadoras como Claro que nos robó a Matías Dimuro, a quien la empresa no le dio ningún elemento necesario para trabajar. A Matías lo asesinó la precarización de esa empresa. De una de tantas empresas que solo se quieren llenar de plata tercerizando a sus trabajadores”.

O como son lo más de 20 repartidores que, desde que inicio la cuarentena, murieron arriba de una bici o moto, cómo es el caso de Franco Almada, que aún hoy la familia sigue exigiendo justicia y pelea contra la precarización.

Como comentaba otro trabajador que colaboró en el aporte al fondo de lucha: “Algunos de nosotros estuvimos también en el Puente Pueyrredón bancando las luchas de todos los trabajadores, y por si quedaban dudas vimos como el Gobierno respondió a nuestros reclamos con palos y gases. Como dijo un trabajador en el encuentro del 05/06 ‘acá nadie se salva solo’.”

Otro de los trabajadores, del sector de aplicaciones, también nos comentaba “Fue por luchar por pelear por otras condiciones de laburo, contra la precarización que la empresa los despidió. No podíamos más que solidarizarnos, quienes sabemos muy bien que es la precarización, les acercamos nuestro aporte a su fondo de lucha”.