En un hecho totalmente vergonzoso, el gobierno se abrió a la posibilidad de revisar los indultos a presos de la revuelta que se otorgaron hace solo semanas. La enorme campaña de la derecha está rindiendo sus frutos en criminalizar la protesta social y el gobierno parece más preocupado por darles la razón que otra cosa.
Lunes 9 de enero de 2023
Sigue la polémica por los indultos a 12 presos de la revuelta del 2019 y al ex frentista Jorge Mateluna. Esta vez, diputados UDI y RN, están exigiendo al gobierno que retrotraiga los decretos de indulto y vuelva a encarcelar a quienes habrían sido liberados por “error” o con criterios diferentes a los que Boric había pedido revisar.
La prensa oficial se ha festinado con el caso de Luis Castillo, de quien han publicado su prontuario de hace casi 15 años para justificar la “incompetencia” del gobierno al momento de evaluar los indultos.
Similar es el caso de Jorge Mateluna quien ya había sido indultado antes y que se encontraba preso por una causa donde los principales testigos de su posible implicancia en el robo de un banco eran exclusivamente los policías que lo arrestaron.
Hasta ahora la salida política que el gobierno le dió a la crisis por los indultos fue el cambio en la cartera de justicia donde aceptó la renuncia de la ahora ex ministra Marcela Rios y la del Jefe de Gabinete Meza-Lopehandía. Ambos cambios se habrían hecho para calmar las aguas pero al parecer no es suficiente.
Con total desfachatez la derecha ahora apuesta por las acusaciones constitucionales contra la ex ministra e incluso hablan de enviar un proyecto de reforma constitución para eliminar las facultades presidenciales del indulto (que ellos han usado para liberar violadores de derechos humanos), todo para ganar el “gallito político”.
Aunque ya sabemos cuales son la estrategia y la política de la derecha, lo más sorprendente ha sido la reacción del ejecutivo y los partidos políticos que conforman la alianza gobierno quienes se han abierto a revisar la situación e incluso retrotraer el indulto en casos particulares.
Abrir esta puerta representa un enorme retroceso para las familias de quienes siguen con causas abiertas o enfrentando la prisión preventiva o condenatoria por causas del 2019 y que siguen esperando a que el gobierno cumpla con sus compromisos de campaña.
Pero con tal de dejar satisfecha la derecha y conseguir un respiro, el gobierno pareciera estar dispuesto a todo, incluso si eso significa mantener en tribunales a presos políticos y a sus familiares enfrentando la terrible situación que se ha prolongado por años.