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Red Internacional
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Tucumán. #UNTLibreDeAcoso: ¿Por qué no se aplica el protocolo contra la violencia de género?

En el marco del Dia Internacional de las Mujeres, estudiantes de la Universidad Nacional de Tucumán realizaron intervenciones en las distintas unidades académicas visibilizando situaciones de acoso y violencia y se movilizaron masivamente.

Miércoles 11 de marzo de 2020 21:47

La mañana del lunes 9 encontró llena de carteles a las 12 unidades académicas de la UNT. Con frases extraídas de los relatos que recolectaron a través de una encuesta: ¿Tuviste alguna situación de acoso siendo estudiante?, que fue la pregunta respondida por cientos de alumnas.

Durante la tarde participaron de la multitudinaria marcha, en una columna encabezada por una bandera que decía “UNT LIBRE DE ACOSO”

¿Y el Protocolo?

Las autoridades de la UNT aprobaron un Protocolo contra la Violencia de género, que rige en las unidades académicas desde el 30 de abril de 2018. Este consiste en una recepción de denuncias, se eligió a una persona (referente) encargada de tomar las denuncias y se puso en las páginas web de las facultades un link con un correo electrónico para que se pongan en contacto con éste. Una vez que se reciben las denuncias anónimas, pasan al Consejo Directivo de cada Facultad y se lo deriva a la Dirección de Asuntos Jurídicos de la Universidad.

Si bien se lanzó este protocolo, el movimiento de las estudiantes demuestra que no viene funcionando. En primer lugar no cuenta con un presupuesto que se destine a conformar un plantel/gabinete capacitado para brindar una atención integral. Queda como un buzón en donde se realiza un descargo, pero la realidad muestra que las estudiantes luego deben volver a cursar, a rendir exámenes bajo la misma situación y muchas veces durante las entrevistas que llegan a tener con lxs responsables son revictimizadas o maltratadas y cuestionadas por tomar la decisión de denunciar.

Posterior al anuncio de la aprobación de estos protocolos, no hubo una capacitación al respecto para docentes y estudiantes, en donde se explicara en que consiste y puedan así saber que cuentan con una herramienta ante las situaciones de violencia en la facultad.

La marea verde en la UNT

Estos vacíos no son casuales. La inclusión de la perspectiva de genero en los planes de estudio de las distintas carreras sigue estando ausente. Un ejemplo puntual es el de la Facultad de Medicina, en donde temas como la actuación en casos de violencia, abuso sexual infantil, y la Interrupción Legal del Embarazo, depende de la visión particular de cada docente en el momento de dictar los contenidos de las materias. El mismo decano, Mateo Martínez, sale a reafirmar una posición personal la cual luego extiende en la unidad académica, directamente sirve para que se resguarden los discursos machistas y antiderechos.

Los contenidos y las practicas dentro de la Universidad publica también están siendo cuestionadas desde el desarrollo de la marea verde, en donde después de pronunciamientos como el de “Facultad que defiende la vida”, anunciado por el decano Martínez, impulsaron la organización de estudiantes en comisiones de mujeres, que decidieron denunciar la violencia, exigir la perspectiva de género y la inclusión de la ILE al ser problemas de salud pública, en la curricular académica de la formación de futuros trabajadorxs de la salud. No es algo desconocido, la injerencia de la iglesia llega a la universidad, tiene las puertas abiertas para realizar eventos, como el XI Congreso Eucarístico Nacional en 2016, misas e influir en la formación de académica.

En la provincia de Lucia y de los dinosaurios como Manzur, en la UNT son miles las estudiantes que forman parte de la marea verde y ahora salen a luchar porque se implementen los protocolos en la Universidad. Como se vio en los últimos días, la movilización de las mujeres sigue siendo la principal fuerza desnaturalizadora de la violencia machista.

Por eso es importante la organización desde las bases, en donde la Iglesia no sé meta, en donde desde cada Comisión de Mujeres podamos decidir que pasos damos y cuál es la educación y contenidos que necesitamos.