×
×
Red Internacional
lid bot

Lucha Obrera. Un año de lucha contra los despidos en ITP-PCB

En noviembre de 2020 ITP-PCB, la filial de ITP Aero -fabricante de motores aeronáuticos y turbinas- presentó un ERE en su plantilla, que tras varias modificaciones afectaba a 83 trabajadores de sus plantas de Barakaldo y Sestao. Desde ese mismo momento los trabajadores comienzan a luchar contra un ERE que califican de “injusto”. En su lucha se han enfrentado la patronal pero también al Gobierno Vasco que al igual que hizo con el conflicto de Tubacex, no ha dudado en utilizar a la Ertxaintza para reprimir a lxs trabajadorxs de ITP

Martes 21 de diciembre de 2021

En 2020, en medio de la pandemia, la empresa dedicada a la aeronáutica argumentó pérdidas para aplicar una serie de despidos. El relato de la empresa, como muchas que pasaban un mal año después de décadas generando beneficios millonarios, era el de la “viabilidad”. La pausa puntual no podía justificar un ERE denunciaron en ese momento trabajadores y sindicatos, más aún en una empresa cuyo grupo ingresó 983 millones de euros en 2019, y su beneficio neto fueron de 95 millones de euros. Los trabajadores se organizaron y salieron a pelear por sus puestos de trabajo.

Los trabajadores además denunciaban que más allá de la pandemia, los despidos se enmarcan en una operación de venta de esta empresa. Rolls Royce, decidió vender la empresa y para ello había que hacerla más atractiva reduciendo sus costes, en este caso a costa de salarios. Esto ocurrió antes de la pandemia y el contexto pandémico fue la excusa perfecta para tratar de imponer los despidos.

Los trabajadores convocaron huelgas y movilizaciones contra los despidos un proceso de lucha que se libró en la calle, a las puertas de las plantas de Barakaldo y Sestao, en piquetes de otros trabajadores en lucha y en los tribunales. A principio de 2021 un juez declaró “nulo” el ERE que la dirección trató de aplicar en PCB. El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco anuló las rescisiones de contrato y obligó a la empresa a readmitir a los trabajadores. Además del ERE, la empresa trató de aplicar dos ERTES. En total 4 sentencias judiciales dan la razón a los trabajadores, sin embargo, la empresa sigue con sus ataques y 83 trabajadores siguen fuera de la planta, se encuentran readmitidos, pero no reincorporados. Además la empresa ha recurrido una de las sentencias al TSJ y próximamente se celebrará un nuevo juico. En este contexto los trabajadores continúan su plan de lucha, una lucha que no ha cesado y que comenzaron hace un año.

En estos más de 350 día de lucha los trabajadores han protagonizado decenas de piquetes, manifestaciones y han buscado la alianza y solidaridad de otros trabajadores en Lucha. Así decidieron apoyar y apoyarse en las y los trabajadores de Tubacex.

La represión hacia los trabajadores organizados

La empresa no cesa en sus ataques a los trabajadores. Además de los despidos, desde el inicio ha tratado de amedrentar a los trabajadores y criminalizar su lucha. Así, la acusó a unos de los delegados sindicales del sindicato LAB por la vía de lo penal por un delito de daños. A esta acusación se sumó la Ertzaintza. El Gobierno Vasco, también está jugando un papel en la represión a estos trabajadores.

Durante las diferentes jornadas de huelga, el Gobierno vasco enviaba cada mañana un enorme dispositivo policial que se encargaba de actuar de forma violenta contra los trabajadoras en lucha", ha señalado el comité.

Además los trabajadores denuncian que acumulan más de 5000 euros en multas.

Los trabajadores y los sindicatos piden acabar con el ERTE en la empresa PCB-ITP. Insisten que no sobra nadie en las plantas de esta empresa en Barakaldo y Sestao. Esta empresa con estos ataques busca unos empleados sumisos y con las peores condiciones laborales posibles. El garantizar este jugoso negocio para los dueños de ITP y todos los actores involucrados en esta operación es lo que explica el nivel de agresividad contra una plantilla que no parece estar dispuesta a ponerse de rodillas ante los ajustes patronales.

Actualmente lxs trabajadorxs de ITP siguen en pie de lucha enfrentándose a la violencia policial y a las continuas sanciones por parte de la patronal. Sin embargo, la senda que marcó el conflicto de Tubacex, también en Euskadi, da moral a la plantilla de esta empresa y permite pensar que, aunque largo finalmente se puede derrotar los planes de despidos.