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Red Internacional
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FALLO DE LA CIDH. Un fallo histórico: condenan al Estado argentino por persecución y crimen racial

El primer caso en que la Corte Interamericana de Derechos Humanos condena al Estado Argentino por la violación de distintos derechos a un afrodescendiente.

Domingo 24 de enero de 2021 14:58

La Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado argentino por la detención seguida de muerte del afrodescendiente uruguayo José Delfín Acosta Martínez. Un fallo que se logra luego de años de lucha por parte de la familia y activistas.

El crimen de José se cometió en 1996 por parte de la Policía Federal. El 5 de abril de ese año, a la salida de un boliche -exMaluca Beleza, en ese momento en la calle Rodríguez Peña y Sarmiento- Acosta Martínez fue detenido arbitrariamente y trasladado a la Comisaría 5ª, donde falleció bajo custodia policial.

De acuerdo con numerosos testigos, Acosta Martínez ingresó en buen estado de salud a la Comisaría 5ª de CABA pero horas más tarde murió mientras era trasladado en una ambulancia al Hospital Ramos Mejía.

Para encubrir los hechos, tanto la Policía Federal como la justicia argentina -y aunque el cuerpo presentaba señales de golpes y torturas-,alegaron que José Delfín Acosta Martínez fue detenido por provocar disturbios en la vía pública y que murió por sobredosis de cocaína y alcohol, al mismo tiempo que se autolesionó en la dependencia policial para inculpar a la policía por lesiones. Ambas versiones son posteriormente desacreditadas tanto por los testigos que se encontraban presentes en el lugar como por una autopsia posterior que fue realizada por la justicia uruguaya y eso fue lo que reconoció la CIDH al concluir que su muerte era responsabilidad del Estado. La causa fue archivada por el Poder judicial de argentina tan sólo 20 días después de su muerte, el 25 de abril de 1996.

José Delfín Acosta Martínez fue fundador del Grupo Cultural Afro, era activista, promotor sociocultural y defensor de los derechos humanos de la comunidad africana-afrodescendiente en Argentina, era luthier, músico, tocaba el bajo, la guitarra, el tambor y también era cantautor, bailarín de candombe, tango y salsa, practicaba capoeira y era profesor de candombe.

En la Sentencia, la Corte advirtió que la detención y muerte de José Delfín Acosta Martínez, ocurrieron en un contexto general de discriminación racial, violencia policial y utilización de perfiles raciales en Argentina.