Los trabajadores de las plantas de San Lorenzo y Ricardone realizan un quite de colaboración de una hora por día. Reclaman la entrega de ropa de invierno, mejores condiciones laborales y pago de las horas extras.
Miércoles 14 de abril de 2021 16:11
Debido a una acumulación de reclamos, los trabajadores de Vicentin decidieron arrancar un plan de lucha esta semana que empieza por un quite de colaboración de una hora por día en las plantas de San Lorenzo y Ricardone. De no tener respuestas favorables este viernes 16 evaluarán la profundización de las medidas. En Sindicato de Aceiteros (SOEA) debería apoyar con todo los recursos disponibles y defender las medidas que dispongan los trabajadores desde ahora para que triunfen.
Hace más de 3 años que la empresa no entrega ropa de invierno y los trabajadores tienen que abrigarse como pueden cuando las bajas temperaturas hacen difícil el trabajo a la intemperie o en galpones abiertos. "La ropa de invierno es re necesaria, pero para que te des una idea, tuvo que dejar de existir un compañero para que recién ahora empiecen a dar la ropa con los reflectivos correspondientes por ley" declara un operario en alusión a la muerte de un trabajador por faltas de medidas de seguridad en 2020.
Desde que Vicentin se entró en cesación de pagos con el Banco Nación aprovechó para avanzar en los derechos y conquistas que fueron ganadas hace años por el sector, imponiendo peores condiciones laborales y profundizando la precarización. La medida busca poner un freno a esta situación de decidia en las condiciones y plantarse contra las compensaciones para no pagar horas extras, y para reestablecer el suministro de leche y aceite suspendido a todos los empleados.
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De fondo Vicentin se encuentra trabajando a fazón con contratos que vencen en septiembre de este año creando un ambiente de tensión e insertidumbre en los trabajadores. En todo el país se está viendo una ola de conflictos obreros muy agudos, desde la pelea de Arre Beef contra los despidos, hasta la lucha de los trabajadores de la salud Neuquén o el bloqueo del Puerto en Buenos Aires, reflejan el ánimo de sectores amplios del pueblo trabajador a resistir el plan de ajuste y miseria que propone el FMI.
En particular los aceiteros vienen de demostrar en 2020 una fuerza enorme y gracias a la unidad pudieron derrotar a las grandes multinacionales que manejan el país. Si esa fuerza puede ponerse al servicio de que cada una de las luchas que llevan a cabo los trabajadores en esta etapa clave triunfen, llegaremos mucho mejor preparados para los grandes ataques que se vienen.