Ayer a la tarde, en la sede de Paseo Colón de la facultad de Ingeniería de la UBA se suspendieron las clases y cerraron las instalaciones. La clase de Física 1 tuvo que terminar de dictarse a la luz las linternas de los celulares de los estudiantes. Respecto del estado de la educación pública... una imagen vale más que mil palabras.

Hasta el momento se desconocen los motivos del corte de luz, pero nadie puede negar que es parte de la precariedad de los edificios de la Universidad de Buenos Aires. El corte sucedió el mismo día que se desató una enorme bronca en todo el país contra el gobierno por el brutal tarifazo a los servicios que pretender imponer a las grandes mayorías trabajadoras.

El macrismo recortó el presupuesto para educación en un 3%. Las universidades nacionales, con el primer tarifazo del Cambiemos en 2016, ya habían anunciado que no podrían pagar las boletas de luz y gas. Ante esto corrió riesgo la continuidad de las cursadas y la apertura de algunas unidades académicas. Además, el gobierno viene de ofrecer un 0% de aumento a los docentes universitarios para la paritaria. Por eso ya hubo un paro de 48 horas la semana pasada y se está convocando a otra medida de fuerza para el próximo 26 y 27 de abril.

Los servicios son un negocio para unos pocos empresarios y no están en función de las necesidades de las mayorías. Es necesario que los estudiantes junto con los docentes, que son los que cotidianamente sostienen la educación pública atacada por todos los gobiernos, salgan a las calles a movilizarse y se organicen de manera independiente en las facultades para enfrentar estos ataques.

En estos días seguramente seguirá habiendo protestas como las de ayer. Los diputados nacionales del PTS en el FIT, Nicolás del Caño y Nathalia Gonzalez Seligra, presentaron un proyecto de ley en el que se plantea la renacionalización de todos los servicios públicos bajo control de los trabajadores y usuarios. Para lograrlo, le exigen a todos los sindicatos y centrales sindicales que se dicen opositores al gobierno un plan de lucha y un paro general.