Si pasas por el Departamento de Humanidades y ves a pibes y pibas teniendo clases en las escalinatas, no pienses que son clases públicas, son los problemas edilicios que no dejan otra alternativa. La realidad es que las autoridades y los órganos de gobierno de la Universidad Nacional del Sur, que tanto hablan de inclusión, no garantizan que ésto sea así en los hechos.
Estos últimos días, estudiantes de Filosofía, Ciencias de la Educación y Letras, tuvieron cátedras en el hall y en las escalinatas debido a que el único acceso a las aulas para algunos de nuestros compañeros y compañeras no funcionan correctamente, haciendo que pasen por situaciones de estrés por quedar encerrados en los ascensores, como le pasó más de una vez a un compañero nuestro. Como también los pasillos de humanidades suelen quedar a oscuras por continuos cortes de luz. Hasta el día de hoy las autoridades no han querido dar a conocer el presupuesto que corresponde para el departamento de Humanidades este año.
Los pibes y las pibas se plantan por la inclusión
Las clases se dieron igual y la solidaridad por parte de los compañeros de cursada se hizo carne. “No sube nadie (a las aulas de arriba) hasta que no se solucione la situación” decían algunos. Las propuestas son concretas, es necesario que los ascensores sean seguros y que exista un protocolo que responda a las necesidades de todos los estudiantes cuando suceden situaciones por el estilo. Ahora bien, las demandas por mejoras edilicias y una mejor calidad de educación no comenzó ésta semana sino que es una exigencia que lleva varios años, pero encuentra hoy un punto de inflexión; no vamos a bancar más que nuestros compañeros de cursada tengan que perder el derecho a estudiar porque el presupuesto no alcanza para incluirnos en el modelo de educación que plantea éste gobierno y las autoridades.
Mientras el gobierno de Macri y los gobernadores del PJ hablan de un “esfuerzo por reducir el gasto público”, aplican un recorte de 3 mil millones de pesos al presupuesto universitario demonizando a los y las docentes que se organizan para pelear por un mayor salario, por la implementación de la ESI y por una educación de calidad que no le cierre las puertas a la inmensa mayoría de la sociedad. Un bajísimo presupuesto que hoy, además, perjudica el comienzo de edificación de la sede del Departamento de Derecho en Palihue.
A pesar de todo esto, las conducciones de los centros de estudiantes de la UNS en vez de jugarse a la autoorganización estudiantil que fortalezca esta pelea, hacen alianzas con las autoridades que dejan pasar el ajuste. Agrupaciones como UNIDAD y Generación son ejemplo de ésto.
Como también es el caso de La Mella – Patria Grande (parte de la conducción del Centro de Estudiantes de Humanidades) que en la Universidad Nacional de La Plata apoyó abiertamente la candidatura antidemocrática de Fernando Tauber, un hombre de la UCR, de las camarillas y del régimen universitario.
Unidad con los que luchan, no con los que ajustan
El pañuelazo y el 8M pusieron en agenda una pelea histórica: el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. Los derechos sólo se conquistan en las calles, no podemos esperar que las mismas autoridades que hacen pasar el ajuste en la educación solucionen nuestros problemas, sino que vamos a arrancar cada una de estas conquistas con organización como se expresa en diferentes sectores de jóvenes en contra de cierre de terciarios en la ciudad.
Así lo demuestran los trabajadores de Cargill, quiénes en medio de una pelea por sus puestos de trabajo, se manifestaron en asambleas docentes y pasadas por los cursos de humanidades con su fondo de lucha, en apoyo a la educación pública, llamando a una necesaria unión entre obreros y estudiantes. Hoy se encuentran instalando un acampe en el acceso al puerto en respuesta al segundo lock out de la patronal. Son los mismos dueños de Cargill quienes pararon la planta, medida que van a mantener hasta el día 30 de Abril, sin pagarle el sueldo a los trabajadores. El gobierno necesita de patronales amigas como Cargill para hacer pasar la reforma laboral, quitando conquistas a los sindicatos más combativos. Acompañemos esta gran lucha que están dando los trabajadores.
En momentos como este, donde cada vez son más que empiezan a ver la necesidad de organizarse, necesitamos que exista la más amplia participación de todxs lxs estudiantes, exigimos y necesitamos una asamblea inmediata para poner en oídos y voz de cada estudiante éstos reclamos. Para Tesis XI y Pan y Rosas, cada asamblea, los debates por curso, cada espacio que se ponga en pie, tiene que ser una instancia de discusión, coordinación y decisión para definir las acciones y medidas a tomar en adelante. |