En el programa que emite La Nación por streaming, Schmid relató la conversación que tuvieron los tres triunviros de la CGT, junto a Gerardo Martínez (UOCRA) con representantes del FMI y Roberto Cardarelli, responsable de la misión del Fondo.
El dirigente de la confederación obrera, dijo que el FMI “ya no es el FMI del consenso de Washington”, “aunque tienen la misma formación académica”, aclaró después.
Si bien denunció que las políticas del FMI “siempre fracasaron”, analizó el nuevo acuerdo del gobierno con el organismo internacional, como un analista político, de manera enrevesada, sin denunciar claramente que el gobierno y el Fondo preparan un cuarto saqueo nacional. Mucho menos propuso una salida de los trabajadores.
Ante la pregunta del periodista si desde la CGT le cuestionaron algo al FMI, Schmid apresurado le afirma que “por supuesto”. -¿Y qué le respondieron?-pregunta intrigado el entrevistador. La pregunta no tiene respuesta.
Ante las reiteradas preguntas del periodista de La Nación al jefe de la CGT sobre si el FMI les dieron alguna respuesta a los supuestos planteos, Schmid respondió una y otra vez con evasivas.
Finalmente y sin dar vueltas, le preguntan a Schmid si la conversación con el FMI los tranquilizó (a los jefes de la CGT NDR). “Nos deja más intranquilos”, responde Schmid.
La “intranquilidad” de los triunviros cegtistas contrasta con la desesperación de millones de trabajadores que ven como mes a mes la inflación y la devaluación se llevan lo que día a día trabajan con mucho esfuerzo.
Después del paro nacional, que fue contundente –a pesar de las direcciones sindicales podemos agregar- la CGT se repliega una vez y en vez de preparar asambleas en los lugares de trabajo y discutir con los trabajadores de base como seguir ante un panorama de ajuste, prefiere la comodidad de sus sillones para hablar con teléfono nada menos con el FMI, los representantes del imperialismo internacional. |