La textil ubicada en Río Grande, Tierra del Fuego cuenta con una planta total de 260 trabajadores, de los cuales 40 habían sido despedidos el mes pasado.
Luego del apoyo que recibieron desde distintos sectores, como los municipales de Ushuaia, los trabajadores, con acampe en la puerta de fábrica y movilizaciones, lograron la reincorporación de todos los despedidos.
Pese a que la fuerza para frenar el ataque estaba y quedó demostrado en las reincorporaciones, la Asociación Obrera Textil negoció con el Gobierno provincial y la patronal las condiciones de la reinstalación que perjudica a los trabajadores para salvar los intereses de la textil aduciendo crisis.
Uno de los puntos que más se destacan del acuerdo, que descarga también la crisis sobre los trabajadores, es un plan de suspensiones. También establece una reducción de la jornada laboral de un 14% en las horas de trabajo, por lo cual, no prestarán servicios durante el turno mañana de los sábados y nocturno del domingo hasta el mes de octubre en detrimento del sueldo.
Incluso desde el gremio lo presentan como una conquista "lo más importantes es que el resto de la planta también cedió horas de trabajo para que ellos, que estaban afuera, pudieran regresar” declaró Rogelio Sager, secretario general de la AOT.
El sindicalista incluso habló del "esfuerzo que hace la empresa para tener de nuevo a los 40 trabajadores reincorporándose” cuando en verdad el "esfuerzo" lo hacen los trabajadores que si bien gracias a su propia lucha no quedaron en la calle, ven reducido su sueldo y deben afrontar nuevas suspensiones gracias al acuerdo que firmó el sindicato para evitar que la crisis la pague la empresa. | 
