Las mujeres en Argentina han dado un gran paso y un ejemplo enorme para las mujeres en todo el mundo. El reaccionario fallo de los senadores argentinos que rechazó que el derecho al aborto sea ley no nos desmoraliza, al contrario, la movilización en las calles ha mostrado que la fuerza está ahí y se ha logrado una victoria importante: exponer al mundo que el derecho al aborto va a ser conquistado. En Bolivia nos movilizamos en 6 ciudades, La Paz, Santa Cruz, Sucre, Cochabamba, Tarija y Llallagua.
Este #8A el mundo se vistió de verde. Millones de mujeres en decenas de países de distintas partes del mundo se manifestaron en vigilias, marchas y plantones por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito y exigiendo que el aborto sea ley en Argentina. En Bolivia las mujeres nos movilizamos en 6 ciudades, La Paz, Santa Cruz, Sucre, Cochabamba, Tarija y Llallagua (Potosí). El resultado de la cámara de senadores con 38 votos en contra, 31 votos a favor, dos abstenciones y un ausentismo terminó postergando esta conquista pero no es una derrota; es cuestión de tiempo porque ¡el aborto será ley!
En La Paz, 200 mujeres de distintos colectivos y organizaciones, mujeres independientes y activistas feministas, nos movilizamos en apoyo a las mujeres argentinas por el derecho al aborto legal. El #8A en horas de la mañana la concentración se dio en la plaza del Estudiante, donde se hizo un corte de rutas formando una columna que se movilizó hasta las puertas del consulado argentino. Al grito de “aborto legal en el hospital” y “hoy es Argentina, mañana Bolivia”, entre otros, hicimos sentir nuestras voces y nuestro apoyo a la gran lucha que vienen dando nuestras compañeras en Argentina.
Qué lecciones nos dejan nuestras compañeras en Argentina
Hoy pese al resultado negativo en la reaccionaria cámara de senadores -donde un puñado de 72 individuos tuvo en sus manos dar la palabra final-, las lecciones que podemos sacar las mujeres sólo pueden ser positivas.
Nos quedamos con sabor a victoria, porque la media sanción en la cámara de diputados que conquistaron las mujeres en Argentina en la jornada del #13J fue arrancada luego de años de lucha y particularmente luego de una masiva marea verde que ese día hizo temblar la cámara de diputados y conmovió al mundo. Ese ha sido un gran paso del cual no se retorna porque ha servido de ejemplo para todas ya que nos ha mostrado que la única forma de conquistar derechos es organizándonos y desde las calles.
Una vez más hemos confirmado que del Estado y de la democracia burguesa no se puede esperar nada. Las mujeres en Argentina pero también las mujeres que hemos seguido esta gran lucha desde distintas latitudes hemos visto cómo una decisión tan vital quedó en manos de 72 individuos absolutamente separados de lo que millones habían ya decidido en las calles. Se escucharon posturas desde las más reaccionarias, pasando por otras que intentaron mostrarse más progres pero que igual no les creemos nada. Un ejemplo lo vimos con la ex presidenta Cristina Kirchner que votó a favor cerrando su intervención con un mensaje de que no quiere ser recordada por la juventud como alguien que falló en contra de un derecho tan básico. Sin embargo no olvidemos que ella tuvo en sus manos todo el poder en su gobierno para haber hecho del aborto ley y sin embargo se encargó al igual que gobiernos anteriores, de encerrar bajo cuatro llaves este proyecto de ley y tuvo el descaro de declararse feminista. CFK durante su gobierno bloqueó 7 veces el proyecto de ley del aborto para que no sea tratado en el congreso.
Pero tampoco podemos dejar de mencionar el rol que la Iglesia y su moral hipócrita han jugado en este fallo reaccionario. Ya que fue justamente la iglesia la que no dudó en utilizar toda una maniobra y un discurso antiderechos, misógino y patriarcal, redoblado después de la obtención de la media sanción en la cámara de diputados el #13J, para evitar la obtención de este derecho fundamental y seguir legitimando el aborto clandestino.
Es por esta razón que también debemos redoblar nuestra lucha para que la separación de la Iglesia del Estado sea efectiva, y exigir que la moral hipócrita de la iglesia se mantenga al margen de las políticas públicas y de los derechos del pueblo trabajador. Es hora de que la religión se vuelva un asunto privado y no un asunto público. ¡Por un verdadero Estado laico, en Argentina, Bolivia y el mundo!
Ya se ha dicho, ¡las mujeres en Argentina han ganado en las calles! La lucha de las mujeres no se queda en la lucha por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito; esa lucha va a seguir, pero creemos que todo lo que viene pasando es sólo una muestra de lo que continúa. La movilización y organización que están logrando las mujeres en Argentina debe ser sólo la levadura para seguir por más. El gobierno de Macri viene implementando medidas tremendas en contra de las y los trabajadores. La misma cámara de diputados que falló a favor de la ley del aborto legal fue la que aprobó el brutal ajuste que se sancionó en diciembre del 2017 contra los jubilados. La única fuerza política que pelea por los derechos de las y los trabajadores, las mujeres y la juventud es el Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) quienes votaron en contra de estos ajustes y quienes desde antes de participar en los espacios de la democracia burguesa siempre pelearon por la legalización del aborto de manera consecuente. Esto es importante destacar no sólo porque muestra que a contramano de lo que muchos grupos de izquierda y variantes autonomistas, anarquistas etc., piensan, el uso de un espacio electoral no pasa únicamente por pelear para administrar el Estado burgués y lucrar del mismo. Nuestros compañeros del PTS en el FIT nos han mostrado que un espacio en el Congreso es para ponerlo al servicio de las luchas extra parlamentarias y desenmascarar lo que al interior del Estado y sus instituciones cocinan en contra de los derechos de los trabajadores y del pueblo pobre.
Hoy el desafío sigue en las calles. Que la bronca e indignación del fallo reaccionario de la cámara de senadores se convierta en más organización. Toda esa fuerza que mostraron las mujeres en Argentina puede marcar un nuevo momento; es decir, puede convertirse en un catalizador para soldar estas luchas de género con las demandas de las y los trabajadores y demás sectores oprimidos. Con este objetivo de soldar las demandas de género con las económico-sociales, contra el imperialismo y las clases dominantes, militamos las compañeras de Pan y Rosas.
Así y sobre la movilización y en el marco de todas las luchas que vienen protagonizando las mujeres a nivel internacional Violeta Tamayo de Pan y Rosas Bolivia, declaró:
“Sabemos que si las compañeras argentinas ganan el derecho al aborto seguro, legal y gratuito, será un gran paso para todas las mujeres, y que este derecho no es una concesión pues lo obtenido hasta hoy ha sido a punta de organización y lucha. Y vamos por más: nos organizamos para luchar por nuestra verdadera emancipación, sabiendo que este problema y las raíces de nuestra opresión en su conjunto, no encontrarán una solución estructural si no es en lucha franca contra sus pilares: el capitalismo y el patriarcado que sostienen la penalización del aborto, así como la explotación y los distintos tipos de opresión en que viven millones de seres humanos, privándonos de un sistema de salud gratuito para toda la población, ofreciendo condiciones de precariedad para la maternidad, imponiendo su obligatoriedad a costa de ser úteros para la generación de más mano de obra barata para el sistema. Sabemos que nuestra verdadera emancipación, es una quimera si pensamos cada lucha de manera aislada, y así como luchamos por el derecho al aborto, proponemos como horizonte la organización junto a toda la clase trabajadora para terminar con este mundo de exploración y opresión”.