En Jujuy, como en todo el país, la juventud tuvo un gran protagonismo en el acto-encuentro realizado en la Sociedad Obrera, en simultáneo con Argentinos Juniors y otras provincias.
La estudiante de Comunicación Social de la UNJu, vocera de la Secretaría de la Mujer del CEFHyCS y referente de las agrupaciones Juventud a la Izquierda y Pan y Rosas, se dirigió a las y los presentes, con las principales conclusiones de la lucha que, durante semanas, sostuvo el movimiento estudiantil de la UNJu.
Discurso completo de Lamia Debbo
Una nueva generación se está poniendo de pie en todo el país.
Acá, estamos presentes los y las estudiantes de la Universidad, que venimos siendo protagonistas de una lucha enorme contra los planes de ajuste en educación, porque el FMI, el gobierno de Macri, los gobernadores peronistas quieren robarnos nuestro futuro. En estos dos meses, les estudiantes dimos un enorme paso adelante y nos organizamos en todo el país. La juventud y el movimiento estudiantil está irrumpiendo cómo un nuevo actor político. Realizamos asambleas masivas, tomamos facultades y llenamos las calles!
Construimos nuestras fuerzas en asambleas por facultad e interfacultades, enfrentándonos a las direcciones burocráticas de los centros de estudiantes, las agrupaciones que son bancadas por el PJ, el kirchnerismo y los radicales. A esos les ganamos asambleas, como en Plaza Belgrano y no pudieron pisar Humanidades semanas enteras, porque los repudió el activismo que surgió en la lucha. A esos burócratas les decimos que ¡no nos callamos más!
El movimiento estudiantil tomo posición, y es por eso que en todas las universidades levantamos un programa exigiendo plata para educación y no para la deuda ni el FMI. Ellos quieren hacer pasar el ajuste con represión. Para conquistar una salida para las grandes mayorías y que la crisis la peguen los empresarios, tenemos con quién aliarnos, con los y las trabajadoras que salen y enfrentan los despidos como en el Astillero Río Santiago, con los obreros de los Ingenios, con los trabajadores de ExIncor que participaron en cada marcha educativa planteando que quieren “un futuro para sus hijos”. La fuerza para enfrentar este saqueo está en esa unidad.
A todes se nos presenta ahora un gran desafío, recuperar los centros de estudiantes compañeras y compañeros, y refundarlos, para que sean una herramienta de lucha, independiente de los partidos patronales y de las autoridades!
Esta nueva generación también es parte de la inmensa marea verde que hizo temblar al gobierno, desafiando a todas las viejas estructuras feudales y eclesiásticas. El Estado y la Iglesia, imponen valores machistas y patriarcales; contra eso, en las escuelas cientas y cientos de secundarios dijeron basta. En las universidades, el movimiento estudiantil bajo los símbolos religiosos.
Los pañuelos se transformaron en un símbolo de rebeldía contra las imposiciones morales, sexuales y la hipocresía de los que dicen defender la vida mientras condenan a cientas de mujeres a morir en la clandestinidad! Nosotres gritamos que ¡Será Ley! y peleamos por la separación de la Iglesia del Estado!
Lo nuestro no es la espera del 2019 de la que habla el kirchnerismo que entrega nuestras luchas ¡La lucha es ahora!
La experiencia que estamos haciendo nos demuestra que este sistema social no tiene nada para ofrecernos; el Senado rechazó el derecho al aborto a pedido de la Iglesia. El macrismo viene por más ajuste a la educación el año que viene. Lo vivimos con Gerardo Morales que en la provincia cerro las principales carreras en los terciarios. Lo vemos en nuestros barrios, donde aumenta la pobreza.
Les estudiantes demostramos una fuerza y energía enorme, aliados a las y los trabajadores, podemos ir por todo. Queremos romper con esos valores individuales de los que quieren ocupar cargos en el estado para administrar el ajuste. A todos esos compañeros y compañeras que vienen siendo protagonistas de estas peleas queremos invitarlos a ser parte de construir agrupaciones anticapitalistas en cada colegio, instituto y facultad.
La lucha por el socialismo, por un mundo sin explotados ni oprimidos, es la única lucha que merece la energía de nuestra generación, estamos llamadas y llamados a cambiarlo todo de raíz, volvamos nuestra energía el motor de la construcción del partido que la clase obrera, las mujeres y la juventud necesitamos para triunfar, y así cambiar el mundo y cambiar la vida, porque no nos alcanza con luchar, nosotres queremos vencer, nuestro horizonte es la revolución socialista. |